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JUANJO GONZÁLEZ / WORD
SALAMANCA
Jueves, 19 de marzo 2020, 17:55
Aldo One, central camerunés, llegó este pasado verano al Salamanca CFUDS para liderar desde la defensa el nuevo proyecto del club del mexicano Manuel Lovato. Lo hizo procedente del Fabril, filial del Deportivo de La Coruña, tras haberse formado con anterioridad en el Real Mallorca. El jugador del equipo charro, aconsejado por el club, ha decidido quedarse en Salamanca a pasar estas primeras semanas del confinamiento ordenado por el Gobierno para frenar la pandemia del coronavirus.
El central señala que «mi primera intención era irme a Mallorca a estar con mi familia pero el club nos ha recomendado quedarnos y así lo hemos respetado». Para One, estar lejos de los suyos «se hace difícil, se echa de menos estar cerca en estos momentos, yo tengo hermanas pequeñas y no son conscientes de lo que pasa. Ahora viendo la TVse han ido dando cuenta de que esto ya no es una broma». Sin entrenamientos ni partidos de fútbol en un horizonte cercano, Aldo One admite que «de momento a nivel mental lo estoy llevando bien. Tengo la suerte de que tengo a mi pareja en casa y eso ayuda. Nos hemos impuesto una rutina desde por la mañana, hacemos tareas y el tema de entrenar lo hacemos juntos... eso te ayuda a pasar la mañana y la tarde».
One, como sus compañeros, está realizando entrenamientos de fuerza en casa para intentar paliar un poco la pérdida de forma por si dentro de unas semanas se reanuda la competición. «Tengo la suerte de tener un entrenador personal y esta primera semana ya me ha mandado trabajo. No es lo mismo que entrenar en alta intensidad pero hay que intentar mantener el tono físico y no perder todo», cuenta el jugador del Salamanca CFUDS, que confiesa que lo que más echa de menos fuera de la familia ahora «es el balón. Es con lo que jugamos, estás tan acostumbrado a hacerlo todos los días y de repente por todo esto te ves obligado a dejarlo de lado». En este sentido, One confiesa que «sí, ya he hecho el reto del papel higiénico y los toques con los compañeros. Así nos reímos un poco entre nosotros y cada día sale un reto nuevo».
Los jugadores del Salamanca CFUDS siguen estos días en contacto en el grupo de whatsApp:«Sí, cada día nos enviamos cosas, de ejercicios, de comidas... así nos entretenemos un poco», explica. One desea «que por el bien de todos pronto recuperemos la normalidad. Hasta ahora no éramos conscientes de lo que teníamos, de estar cerca de la gente y cosas así nos van a hacer valorar lo importante que es tenernos los unos a los otros».
La temporada de One y sus compañeros en el Salamanca CFUDS está siendo muy atípica, repleta de cambios de entrenadores, después con los problemas económicos extradeportivos, ahora con el parón del coronavirus... «Ha sido un año muy raro... Pero hay que coger la parte buena de todo. Aprender de ello, nos ha pasado este año y ser fuerte para seguir adelante».
Por último, el jugador del Salamanca CF UDS admite que la mejor cara del curso la están encontrando en la afición porque «desde que llegué a Salamanca me impresionó, que una ciudad tan pequeña, con el equipo histórico de la ciudad que digamos... hay que agradecerles que estén ahí a pesar de todo lo que hemos pasado durante esta temporada».
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