El pasado Carnaval del Toro de Ciudad Rodrigo sigue generando noticias y ahora se ha sabido que el Delegado de la Autoridad (lo nombra el Ayuntamiento), ha presentado una denuncia contra un vecino de Madrid por una presunta agresión al coordinador de los encierros.
Hay que recordar que las personas encargadas de estos festejos deben velar por la seguridad y el normal desarrollo de la cita y en un momento dado, volver a alguno de los animales puede desembocar en situaciones de mayor peligro.
En el relato de los hechos que se recogen en la documentación presentada, se dice que el denunciado portaba un paraguas con el que golpeó a los toros «con el fin de romper el encierro». Apesar de que se insistió en llamarle la atención, se desentendió de esos requerimientos y de hecho, llegó a insultar al coordinador llamándole «gilipollas» o diciéndole «vete a tomar por el culo».
La situación llegó a mayores pues en un momento dado el denunciado se encaró con el coordinador, «agrediendo al mismo», siendo necesaria la intervención de algunos de los presentes para que cesara dicha agresión.
Es más, ese mismo día no dejó de correr por los grupos de mensajería instantánea una vídeo en el que se veía la situación que se desencadenó por lo que se entiende que esa es otra de las pruebas con las que cuenta la autoridad para presentar esa denuncia, además de los testigos presenciales.
Otro de los argumentos que se refleja en la denuncia es que «dicha agresión pudo derivar en un altercado de orden público de mayores dimensiones causando una gran alarma entre los asistentes al Carnaval del Toro». Precisamente, ese día 23 de febrero coincidió con el Domingo de Carnaval, la jornada de mayor afluencia de público dado que se desarrolla el encierro a caballo.
Legislación
Estos hechos, pueden ser constitutivos de una infracción grave según se recoge en el artículo 38.2 del Decreto 14/1999 por el que se aprueba el Reglamento de Espectáculos Taurinos Populares de la Comunidad Autónoma de Castilla y León que establece: «La desobediencia por los caballistas, corredores e informadores a las directrices que marque el director de lidia, el director de campo, el delegado de la autoridad y los colaboradores voluntarios y/o a las órdenes de personas del control y de orden».
Por otra parte, esta denuncia se puede interpretar como una llamada de atención desde el punto de vista de que se vela por la seguridad de las personas y el bienestar animal y que en carnaval, no todo vale.
No es la primera ocasión, sin llegar a este extremo, en la que los trabajadores responsables de diferentes aspecto del Carnaval del Toro se ven increpados dentro del desarrollo de sus cometidos.