Los datos del INE confirman la pérdida del 30% de la población en 26 años en la comarca de Ciudad Rodrigo

La población de la comarca de Ciudad Rodrigo ha pasado de 37.829 habitantes en 1991 a 26.855 a 1 de enero de 2017, según datos del INE (Instituto Nacional de Estadística) y del Padrón Municipal. Esta disminución de población significa una pérdida de casi el 30% de los habitantes de la comarca durante este periodo. Tan solo en el último año se produjo una pérdida de población del 1,5 %, al pasar de 27.274 habitantes en el padrón de 1 de enero de 2016 a los referenciados 26.855 del padrón de 1 de enero de 2017.

Todos estos datos fueron expuestos por el procurador socialista en las Cortes Juan Luis Cepa que, amparándose en los mismos, defendió una Proposición no de Ley para incorporar dentro de la Agenda de la Población medidas específicas para contribuir a que se fije población durante los próximos años en la comarca mirobrigense. La propuesta no fue apoyada por el PP.

Según Juan Luis Cepa, «se está perdiendo población a un ritmo importante, 349 habitantes durante el año 2014; 465 durante el año 2015; 419 durante el año 2016 y las proyecciones del año 2017 no son nada positivas».

Según la última Estadística de Variaciones Residenciales publicada por el INE, la capital ganó 568 habitantes, sin embargo, en el capítulo negativo se sitúan Ciudad Rodrigo y Béjar con una pérdida de 114 y 120 habitantes, respectivamente.

También como dato negativo, y concretamente para Ciudad Rodrigo, «el crecimiento vegetativo es negativo, a parte de la emigración de nuestros jóvenes».

Durante el año 2017 hubo 84 nacimientos frente a 167 defunciones, el doble de defunciones que de nacimientos y ya adelanta:«En lo que llevamos de año, faltan por contabilizar dos meses, llevamos 63 nacimientos y 123 defunciones, cifras algo mejores, pero muy poco. Del resto de pueblos casi mejor no decir nada, posiblemente en muchos casos cero nacimientos, bastantes defunciones».

Durante la comisión en la que formuló la proposición, el procurador afirmó que «el problema radica fundamentalmente, a finales de la década de los 50 y primeros 60, con la revolución agraria y el éxodo a los núcleos de desarrollos promovidos por el franquismo, ésta es la clave estructural, quienes se fueron eran los que estaban en edad de formar una familia y aquí empezaron a quedarse las personas más mayores, esto es lo que provoca que después de nuestra generación, el crecimiento vegetativo será sólo negativo». Y añade: «En los años 60-70 y casi hasta el final de siglo había un modelo económico: una economía agraria importante en una amplia comarca, que no era sólo Ciudad Rodrigo, sino todos los Arribes y el norte de Cáceres, y una ciudad que prestaba unos servicios, esto se va perdiendo paulatinamente y el gran problema actual es que no tenemos modelo de desarrollo económico».