El alcalde de Salamanca fulmina al concejal de Turismo tras el fiasco del 'congreso de los jeques'

La bomba ha estallado a las 15.14 horas cuando ha llegado un comunicado del servicio de prensa del ayuntamiento. La nota, muy simple y escueta (dos párrafos que suman 7 líneas): «El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha decidido retirar las delegaciones de Turismo y de Relaciones con las Universidades al concejal de Ciudadanos Fernando Castaño, a quien también ha pedido su dimisión».

Según reza la nota, «teniendo en cuenta que el propio Castaño puso su cargo a disposición del alcalde, García Carbayo ha resuelto prescindir de él dentro del equipo de gobierno, tras la polémica suscitada en torno a la contratación del ya exasesor de proyectos estratégicos, inversiones e internacionalización».

Hace unos días, trascendió que el concejal de Turismo le había puesto su cargo a disposición del alcalde y que este le había rechazado la dimisión. Sin embago, el propio alcalde aclaró este extremo en una entrevista radiofónica en la que explicó que lo que le había pedido al concejal era una declaración inequívoca desmarcándose tanto de la contratación del asesor cesado por no tener título como del proyecto de Peace City World.

El pasado viernes, el concejal de Cs se desmarcaba en una nota pública de la contratación del asesor por sentirse «profundamente engañado» por esta persona, que logró por concurso plaza para intermediar en la búsqueda de inversores y proyectos. Sin embargo, el concejal no hizo lo propio con la idea de Peace City World, que ha sido una de sus grandes apuestas, y que el alcalde no ve nada claro: de hecho, ha roto el protocolo firmado entre el consistorio y esta entidad.

La decisión ha sido bastante sorpresiva y llega en una semana que terminará el viernes con un pleno monográfico sobre lo ocurrido en torno al 'congreso de los jeques', incluyendo el cese de un asesor municipal y la controrversia con lo que el alcalde ha llamado «proyectos fantasiosos» y con los que ha tomado distancia, según publica salamancahoy.

Esa distancia ha acabado en la petición de dimisión del alcalde al concejal, al que ya ha desvestido de todas sus atribuciones. Es competencia del alcalde el reparto de delegaciones a los concejales, algo que se hace al comienzo de legislatura o cuando hay cambios, como ocurrió con la dimisión del exconcejal Daniel Llanos. La renuncia es, por contra, algo personal porque el acta pertenece al concejal por lo que no puede haber cese en el cargo, pero sí en las responsabilidades.