Adelantar el encierro una semana habría evitado el 58% de los contagios en Salamanca

El citado estudio, publicado por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) recoge las simulaciones matemáticas de ambos docentes, que analizan la efectividad de las medidas adoptadas en la pandemia contra el coronavirus y calculan cómo estaría España si hubiera decretado el estado de alarma una semana antes de lo que lo hizo y también cómo estaría si no lo hubiera hecho.

Las conclusiones están segmentadas por provincias. Los profesores elaboraron sus cálculos a fecha 4 de abril. Ese día, Salamanca tenía 1.659 casos de coronavirus. Si el estado de alarma se hubiera decretado el 7 de marzo y no el 13, Salamanca habría tenido 695 positivos en vez de los referidos 1.659 (un 58,1% menos). Por el contrario, si el Gobierno no hubiera tomado ninguna medida, el número de pacientes el 4 de abril habría sido de 4.634 (un 64,2% más de los registrados). Cabe reseñar que es la provincia de Castilla y León que menos vaivenes habría sufrido. El caso de Ávila es mucho más extremo: hubiese tenido sólo ocho pacientes y no 679.

Seguramente las inclinaciones políticas sesgarán la lectura de estos datos. Los propios autores explican en su estudio que «según nuestras simulaciones, el número de casos confirmados en la España peninsular hubiera aumentado, en ausencia de estado de alarma, de 126.000 a 617.000 casos a fecha de 4 de abril de 2020. Con dicha medida, por tanto, se han evitado alrededor de 491.000 infecciones confirmadas, lo que representa una reducción media del 79.5% en el número de contagios potenciales».

Sin embargo, añaden, «nuestras simulaciones ponen también de manifiesto que se hubiera podido ahorrar un numero aun mayor de contagios y, por consiguiente de fallecimientos, si las medidas de control asociadas a la declaración de alarma se hubiesen puesto en marcha con sólo una semana de antelación. El número de casos confirmados hubiera pasado a 47.000, menos de la mitad los confirmados a fecha de 4 de abril. Señalar finalmente que tal disminución hubiera evitado probablemente el colapso de muchos hospitales en nuestro país».

Los resultados indican «que una mayor población junto con un elevado número de personas de edad media y con estudios superiores contribuyen a adelantar la aparición de contagios. También obtenemos que el inicio, e intensidad, de las epidemias provinciales depende de la movilidad internacional, lo cual sugiere que las medidas de control de viajeros procedentes de zonas previamente afectadas, como es el caso de Italia, deberían haberse puesto en marcha mucho antes, en línea con las decisiones adoptadas en otros países». El estado de alarma rompió el «círculo vicioso» de contagios entre provincias. De acuerdo al informe «la movilidad de la gente entre provincias ha jugado también un papel significativo en la propagación del virus».