San Bernardo reclama que el Consistorio acabe con la suciedad y maleza de varias calles

La asociación de vecinos del barrio de San Bernardo ha mostrado, a través de un comunicado colgado en su página web, su sorpresa ante la respuesta recibida por parte del Consistorio a sus propuestas de inversiones, dentro del proyecto de presupuestos participativos. Según relatan los vecinos, la idea que plantearon ante el Consistorio fue el ajardinamiento de las calles Tórtola, Gamo, Garza y Cisnes. Vías que no cuentan con tráfico rodado y que, en palabras de Asanber, se encuentran «en un estado de abandono manifiesto, llenas de maleza y ocupadas habitualmente por personas que sacan allí a sus perros a realizar sus necesidades fisiológicas». Por ello, los vecinos de estas calles se quejan de forma continua por los malos olores y la suciedad que tienen que soportar.

«Aprovechando la oportunidad que ofreció el Ayuntamiento de realizar propuestas para la partida destinada a presupuestos participativos, dentro del presupuesto general para 2017, la asociación Asanber presentó una iniciativa en la que se solicitaba el ajardinamiento de estas cuatro calles», relata la propia organización, que continúa indicando que la respuesta les llegó a través de un correo electrónico, firmado por la concejala de Participación, Carmen Sánchez Bellota.

Viales de zahorra

«La respuesta que hemos recibido del Ayuntamiento resulta tan ridícula que no podemos por menos que echarnos a reír, aunque lo que de verdad nos pide el cuerpo es ponernos a llorar», afirman. Y es que el argumento por el que se rechaza la idea de Asanber es, literalmente, que esas calles no pueden ajardinarse «por tratarse de viales de zahorra compactada».

«¿Qué más dará que esos viales tengan en la actualidad tierra, asfalto, zahorra o arena? Lo que pedimos es que se adecenten unas calles que ahora mismo son una auténtica vergüenza, llenas de maleza, donde no se puede entrar por miedo a mancharse los zapatos con los excrementos de los perros que acuden habitualmente allí», responden a su vez los vecinos de San Bernardo, que añaden que, «convenientemente ajardinadas y dotadas de unos bancos, serían un lugar perfecto para que la gente saliera a tomar el sol en el buen tiempo, a disfrutar del fresco en los días calurosos, y a convivir con el resto de los vecinos de la zona». Algo, puntualizan desde la asociación, que es cada vez «más necesario» en un barrio con mucha población de edad avanzada, «que no puede desplazarse a otras zonas verdes más alejadas».