Julieta tendrá que esperar

La ciudad de Salamanca tendrá que esperar más de lo previsto para verse en televisión convertida en Verona. Según varios medios especializados de los Estados Unidos, la serie 'Still Star-Crossed' no cuenta aún con fecha de estreno oficial y es probable que se retrase al verano o, incluso, al otoño. De igual modo, puede que cuando finalmente la serie de Shonda Rhimes vea la luz lo haga con otro nombre, diferente al de la novela de Melinda Taub en el que se basa.

Al parecer, el montaje de los capítulos, rodados en su mayoría entre Salamanca y Extremadura, va algo más lento de lo previsto, y los responsables de la cadena ABC han dejado de contar con esta serie como una de sus importantes y fuertes novedades para la temporada 2016-2017. De hecho, ya ni se contempla que pueda estrenarse en la denominada mid-season, esto es, en primavera, sino que la opción veraniega cobra fuerza. Según esos mismos medios, los rumores apuntan a que la cadena ABC tiene previsto venderla al mercado europeo o, incluso, convertir los diez episodios rodados en seis, pasando al formato de miniserie.

Estos comentarios surgen por el poco impulso que la propia cadena está dando a la difusión de la serie, cuyas redes sociales no informan desde mayo del año pasado, prácticamente desde el estreno del tráiler y la confirmación de la concesión de temporada completa por parte de ABC, tras el rodaje del episodio piloto en Salamanca.

Falta de información que extraña, ya que el rodaje del resto de capítulos continuó semanas después, hasta el otoño, tanto en Salamanca como en varias localidades extremeñas. Pero, por el momento, no existen más datos acerca de esa fecha de estreno o de si la serie podrá verse en Europa y, por tanto, en España en los próximos meses.

Por su parte, los actores, finalizada ya la grabación, se han incorporado a otros proyectos, circunstancia que descarta, casi con seguridad, que pueda rodarse una segunda temporada de la producción histórica ambientada en Verona tras la muerte de Romeo y Julieta. En concreto, la serie narra los hechos acontecidos entre las familias Montesco y Capuleto una vez desaparecidos los famosos amantes, cuya boda y funeral se rodaron en Salamanca, en localizaciones como la Catedral Vieja o el convento de San Esteban. La productora centró la acción de ese primer capítulo también en la Casa de las Conchas, la Clerecía y Universidad Pontificia, calle Compañía y el palacio de Anaya, lugares que se pueden ver a la perfección en el tráiler estrenado el año pasado.