Villoruela se Mueve hace socio de honor a Jero Hernández por encender la Navidad

Ayer se produjo el encendido oficial del árbol construido con 9.000 CDs por los vecinos de Villoruela. La mano que pulsó el interruptor del mágico árbol levantado con el esfuerzo de un pueblo unido en las siglas de Villoruela se Mueve fue Jero Hernández.

La plaza de España de Villoruela estaba pletórica, tanto por la cantidad de personas que se reunieron como por la intensidad de emociones que se pudieron vivir.

Las palabras de Jero Hernández fueron contundentes a la hora de poner en valor lo que hace de este pueblo un ejemplo a seguir, con iniciativas como la presente. Hizo un breve comentario en el que dejó plasmado el espíritu que impulsa a Villoruela se Mueve, cuando dijo:«como todos nuestros pueblos, nuestra tierra, todo lo que emprendemos es mucho más grande y mucho más bonito porque está hecho con el esfuerzo y la aportación de todos». De hecho quiso dejar claro que «todos juntos es la única manera que podemos sacar adelante nuestros proyectos y nuestra tierra».

En el acto estuvo presente la identidad al cien por cien, sobre todo, previo a la presentación de Jero Hernández, en que se le obsequió con un sillón de la abuela, fruto del trabajo de un artesano del mimbre de Villoruela. También le regalaron una cesta con productos de Navidad. Como gratitud a su disposición, según se pudo escuchar en el acto, Jero Hernández fue nombrado socio de honor de Villoruela se Mueve.

La tarde estuvo marcada por la humanidad, que desprende tanto trabajo realizado por el aporte de muchas personas, pero también por el cariño de Jero Hernández, que desde que llegó no cesó de recibir saludos y de posar junto a niños y mayores que querían fotografiarse con él.

En el acto tampoco faltó la nota cómica, gracias al famoso desafío maniquí o mannequin challenge, y para entrar en calor y celebrar el encendido, un chocolate con bizcochos.

Esfuerzo

El buen hacer de Jero Hernández, que dio de sí sus victorias en el programa Pasapalabra, se puede comparar con el esfuerzo de todo un pueblo, el de Villoruela, que quiere salir adelante y gracias a los retos que se va marcando y superando, está siendo ejemplo a seguir. Sirva como ejemplo este árbol navideño, que comenzó siendo una «locura», tal y como lo definieron ayer los responsables de Villoruela se Mueve, pero finalmente se consiguió.

También el año pasado se marcaron una meta que lograron, que fue levantar un árbol con botellas de plástico. Esos materiales después se reciclan, únicamente queda la estructura, que es la misma, por ello tanto el del año pasado como éste miden siete metros de altura y cuatro de base. Los materiales no se guardan porque lo importante no es lo material sino el aporte humano, el esmero, el empeño, la unión de un pueblo y la participación en la que se han implicado tanto personas de Villoruela como de toda la comarca, desde Cantalapiedra y Peñaranda de Bracamonte hasta Salamanca, e incluso han recibido CDs por correo de ciudades lejanas.

La plaza estaba repleta de personas, alrededor de 400, y ese es otro de los resultados de esta iniciativa, que es una más de las muchas que conforman el programa de actividades de Villoruela se Mueve.

Por ejemplo, a partir de hoy y hasta el próximo 4 de enero de 2017 se abre el II concurso de selfies, que el año pasado tuvo un resultado entrañable, resultando como ganadores un matrimonio de panaderos mayores.

Para estos días navideños, Villoruela cuenta con numerosas propuestas puestas en marcha por la asociación Fray Junel en conjunto con el resto de entidades y el Ayuntamiento. La siguiente es el festival navideño del colegio Villa de Felipe II, que será este miércoles a partir de las 11:30 horas en el Multiusos Bernardo Cuesta.