La Guardia Civil gestiona 18.200 licencias de armas y apuesta por su modernización

Las diferentes jerarquías y mandos del cuerpo de la Guardia Civil, desde el rango de teniente coronel hasta el puesto de cabo, fueron homenajeados ayer durante la celebración institucional que organizó la Benemérita en honor a su patrona, la Virgen del Pilar.

El pabellón deportivo de la Comandancia de la Guardia Civil fue el escenario elegido, un 12 de octubre más, para el desarrollo del acto institucional, que concluyó con un desfile de los vehículos de la unidad motorizada de la Guardia Civil por el patio de la Comandancia. El acto, al que asistieron los máximos responsables de las diferentes instituciones salmantinas, incluyó la entrega de 25 distinciones a diferentes miembros de la Guardia Civil, así como otros tres galardones más a personas que no forman parte de la Benemérita. Uno fue concedido a una administrativa del centro penitenciario de Topas, mientras que los otros dos, en forma de placas de reconocimiento, recayeron en la Inspección de Trabajo y de la Seguridad Social de Salamanca y en la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil del Ayuntamiento de Santa Marta de Tormes.

El teniente coronel jefe de la Comandancia, Jorge Montero Llácer, subrayó que el acto institucional de ayer fue el colofón a un programa de actividades desarrollado a lo largo de la última semana, que incluyó competiciones deportivas, juegos infantiles y actos religiosos. Aprovechó la ocasión para resaltar que se cumplen 30 años de la constitución, en el seno de la Guardia Civil, de la especialidad de intervención de armas y explosivos, inspirada bajo la filosofía fundacional de la Benemérita de que «nadie ande con armas por parte alguna sin la correspondiente licencia para usarlas».

Jorge Montero Llácer destacó que la Guardia Civil dispone de cuatro unidades especializadas en intervención de armas, que se encuentran operativas en Bejar, Ciudad Rodrigo, Vitigudino y Salamanca, prestando servicio en las mismas una veintena de agentes de diferentes empleos. Su tarea se caracteriza por una importante carga administrativa, ya que tienen que gestionar las 18.200 licencias de armas existentes en la provincia, que amparan casi 26.000 escopetas, 3.800 rifles y 1.500 carabinas. Estas tareas precisan de una modernización mediante el empleo de las nuevas tecnologías, que permitirán «reducir todavía más el número de las armas que puedan existir ilegalmente, incrementando así los niveles de seguridad».

La desarticulación de organizaciones y grupos criminales fue el otro logro que ensalzó Jorge Montero Llácer durante su alocución en el pabellón de la Comandancia, que se encontraba abarrotado de público. Durante los últimos 12 meses se desarrollaron cuatro relevantes operaciones, que supusieron la detención de 26 personas y el esclarecimiento de más de medio centenar de robos con fuerza. Otras cuatro operaciones más conllevaron la detención de 21 personas dedicadas al tráfico de drogas, con la incautación de diferentes sustancias prohibidas y armas de fuego.

El teniente coronel apostó por continuar colaborando de forma estrecha con el Cuerpo Nacional de Policía, con las Policías Locales y con los homólogos portugueses, ya que «los delincuentes no conocen de competencias, ni de demarcaciones territoriales, y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado respetando la legislación, debemos buscar el incremento de la eficiencia, especialmente en estos tiempos en los que los recursos de que disponemos son más limitados».

Tras agradecer expresamente al alcalde la concesión la Medalla de Oro de la ciudad a la Guardia Civil, Jorge Montero Llácer invocó a la Virgen del Pilar, patrona de la Guardia Civil, para que «nos siga protegiendo a todos los miembros de esta Comandancia durante la prestación del servicio».