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Jorge Holguera Illera
Viernes, 8 de julio 2016, 12:02
Ha entrado el mes de julio de pleno y en Salamanca de momento parece haber pocas ganas de salir de vacaciones. En opinión de Juan José Marco, director de Viajes Salamanca, «la Eurocopa y las elecciones han condicionado mucho», porque aunque afirma que hay un poco más de optimismo, estos dos asuntos parecen haber propiciado que no se note demasiado el aumento de vacaciones con respecto a otros años. También hay que tener en cuenta que en esta agencia de viajes, que tiene sus oficinas en plena Plaza Mayor, el perfil de cliente es medio alto, con lo que el desánimo en tiempos de crisis también fue menor. En Pisa Mundo Viajes tampoco ven mucha alegría, ya que según declaraciones de su directora, Magdalena Montero, «la venta anticipada funcionó muy bien, pero en mayo parece que los clientes se echaron un poco para atrás, después se reactivó y en junio volvió a bajar, quizá por el tema de la declaración de la renta», opina.
Por si fuera poco, a estos frenos hay que sumar el temor a posibles atentados como el acaecido ayer en una cafetería de Daca (Bangladesh). Este destino no se encontraba entre los preferidos por los salmantinos, no obstante, estas fatalidades marcan un antes y un después haciendo que las zonas que sufren pierdan el interés para el turista.
Lo cierto es que el mes de vacaciones por excelencia suele ser agosto y este año más, quizá por las dos circunstancias mencionadas por Marco, que han hecho al ciudadano mantenerse cauto. La estabilidad nacional pesa y la demora en formarse un Gobierno parece que también atañe al capítulo del necesario descanso.
Lo cierto es que la mayoría de los salmantinos que salen de vacaciones a un destino en el que han de reservar hotel suelen pernoctar una media de siete noches. Este periodo se ha estabilizado desde hace unos años, anota Magdalena Montero. Esto en el caso de un cliente al uso, pues también hay que tener en cuenta múltiples diferencias en el perfil económico y las circunstancias familiares y de otro tipo de cada persona. Sirva de ejemplo el caso del cliente medio de Juan José Marco que respeta dos salidas vacacionales anuales, pasa entre 7 y 10 noches y gasta entre 1.500, 3.000 y hasta 5.000 euros por persona.
Esta época es muy propicia para los viajes de novios, argumenta el director de Viajes Salamanca, quien pone de ejemplo como opción estrella Estados Unidos combinado con una estancia en playa, por ejemplo Bali o Maldivas. Estas fechas también están de moda los cruceros en familia, que según Marco, «consisten en un paquete vacacional por el Mediterráneo o el Norte de Europa». Las familias que no salen de España están optando por acudir a Cádiz y Huelva, en este sentido los salmantinos tienen preferencias bien distintas a los habitantes del norte de Castilla, que según Magdalena Montero, optan por Levante.
Entre los nuevos destinos destacan Japón o Canadá. Juan José Marco también reseña África, con safarí y estancia en la isla del Índico. Otro destino con apogeo es la Isla de Mauricio, gracias a la existencia de un vuelo directo, donde una de las virtudes es «que no hay problemas de inestabilidad por riesgo de monzones o uracanes como puede ser en el Caribe», explica Juan José Marco. Además estos destinos pueden incluir safaris. Cuba es elección estrella de este verano, pues «estamos teniendo mucha demanda y poca oferta», explica Juan José Marco, ya que «quieren ir antes del cambio que se está produciendo ya».
Un cliente potencial son las personas mayores, y un destino que no falta nunca entre los más demandados es Benidorm. La ciudad de los rascacielos, del buen clima asegurado, y de la oferta de ocio para todos es el destino más elegido por personas que se han liberado de cargas familiares. Es un destino muy atractivo también porque, por ejemplo, en Viajes Salamanca ofrecen todo organizado con transporte incluido desde aquí.
Los precios en destinos como Baleares y Canarias se han puesto por las nuves, considera Juan José Marco. Algo que no es de estrañar, teniendo en cuenta que Tunez, Egipto y en general todos los destinos asiaticos, han quedado relegados al olvido por la mayoría de turistas europeos que buscan tranquilidad y una seguridad que encuentran en Portugal y sobre todo en España, pero esto ha originado grandes subidas de precio, «algo que nadie queria creer», anota Montero. Ella ya lo venia avisando y sus clientes más avispados optaron por reservar en febrero y marzo. Estas personas se han podido ahorrar entre un 30 y un 40% de los gastos en hoteles y viajes, calcula. En relacion con otros años, en Pisa Mundo Viajes estiman que las vacaciones se han encarecido de 200 a 300 euros.
Recomendaciones
El comprar las vacaciones a última hora es un riesgo en doble sentido, por el precio y ahora más por la facilidad de encontrarse con destinossin plazas libres. Por ello, la recomendacion de Magdalena Montero es reservar las vacaciones en febrero. Juan José Marcos aconseja organizar todo con tiempo y elegir los meses de junio o septiembre, si se puede, «es el momento perfecto para viajar» porque es más económico.
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