Secciones
Servicios
Destacamos
Ricardo Rábade
Miércoles, 18 de mayo 2016, 12:42
Un impertinente catarro que dificultaba el habla impidió ayer al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, desplazarse a Salamanca para rubricar el ansiado convenio de colaboración con el rector Daniel Hernández Ruipérez, que supone la cesión de uso a la Universidad del antiguo edificio del Banco de España con el fin de transformarlo en el futuro Centro Internacional de Referencia del Español, uno de los proyectos estrella del VII Centenario del Estudio salmantino en el año 2018. Pese a la suspensión de su visita por esta inesperada e imprevista indisposición, el acuerdo se firmó finalmente en la Casa Museo Unamuno, sustituyendo a Montoro la considerada como su número 2, es decir, la subsecretaria de Hacienda y Administraciones Públicas, Pilar Platero.
La materialización del ambicioso proyecto, que pretende reforzar el indiscutible liderazgo internacional de la Universidad de Salamanca en la enseñanza, la difusión y la investigación del español, contó también con las intervenciones de la consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, Josefa García Cirac, y del alcalde de la ciudad, Alfonso Fernández Mañueco.
El convenio sellado ayer ejemplifica la continuación del protocolo previo firmado en octubre de 2015 por Pilar Platero, el rector y el alcalde, que sentó las bases para dar cobertura a la operación de traspaso del antiguo inmueble del Banco de España a la Universidad. El pasado 19 de abril el proceso experimentó un salto cualitativo, con la rúbrica de un acuerdo entre el rector y la consejera Josefa García Cirac. En virtud de los contenidos del mismo, la Junta se compromete a financiar en su totalidad tanto el proyecto de redacción como las obras de acondicionamiento del emblemático edificio de la plaza de Los Bandos
Sin embargo, ni el rector ni Pilar Platero se atrevieron a aventurar plazos sobre la ejecución de las obras de restauración del edificio y sobre la posible fecha de inauguración del nuevo centro. Eso sí, el rector expresó su deseo y confianza en que estos plazos sean lo más breves posibles. Ruipérez y Platero también derrocharon prudencia cuando rehusaron aportar cantidades precisas sobre la inversión que resultará necesaria para el acondicionamiento y al transformación del inmueble, pese a que meses atrás el Vicerrectorado de Economía apuntó una estimación aproximada de unos 13 millones de euros como montante previsto para financiar las obras de remodelación del edificio.
Ante la insistencia periodística, que siguió a la protocolaria y simbólica entrega de las llaves del antiguo Banco de España por parte de Pilar Platero a Daniel Hernández Ruipérez, la subsecretaria de Hacienda rememoró el elevado desembolso que afrontó el Estado en el año 2004, cuando decidió comprar la antigua sucursal del Banco de España por ocho millones de euros, impuestos excluidos. «Hemos dado en la diana y hemos acertado plenamente, es «un proyecto entrañable» y es «un regalo del Ministerio de Hacienda, que muestra así su cara más amable», enfatizó Platero.
Ruipérez subrayó que el futuro centro es fruto de la colaboración interinstitucional y lo definió como «el nodo más importante en el mundo en la investigación y formación en español» y cuya cesión por parte del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas es importante dar a conocer para que «el ciudadano perciba el valor de lo que hace con sus impuestos».
«Actualmente se dice que ya no hay más patria que el idioma y Hacienda», afirmó Ruipérez, quien ahondó en que en los tiempos actuales se trata de los dos factores que «dan unidad cultural a un país y sustentan al Estado, respectivamente». También resaltó que la lengua española es «fuente de prestigio e ingresos» para la Usal, que financian «los valores y la fortaleza para afrontar los 800 años venideros en el liderazgo del español».
A partir de ahora, concretó Ruipérez, arranca un periplo para «empezar los trámites de elaboración del proyecto básico, de adjudicación de obra y ejecución, concursos, licitaciones y pliegos», en lo que definió como «procedimientos a los que obliga la Ley de Concursos del Estado y que hacen que las cosas no puedan ser tan inmediatas como gustaría». El rector y Platero coincidieron en remarcar que con la firma del acuerdo y el traspaso de las llaves «ya no hay marcha atrás» en el proyecto, con independencia del color político del futuro Gobierno. Platero descartó de esta forma la idea auspiciada durante el Gobierno socialista de Zapatero de reconvertir la exsede del Banco de España en el Museo Nacional de Arquitectura, al tiempo que precisó que la paralización de aquel proyecto no obedeció a la llegada al Gobierno del PP, tal como se ha sostenido en algunos círculos. La resolución del convenio se consumó el 1 de enero de 2013.
El nuevo centro, una vez que sus obras de rehabilitación y acondicionamiento estén completamente terminadas, albergará en sus tres plantas, más un sótano y un bajo cubierto, la Cátedra de Altos Estudios del Español, el equipo de I+D+i de Cursos Internacionales, una biblioteca y el Espacio de Creación Digital del Español. No obstante, el rector no ocultó que existe una cláusula en el convenio, que podría permitir al Estado solicitar la reversión del edificio si la Universidad no crea finalmente el nuevo complejo lingüístico, una improbable posibilidad que descartó totalmente.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.