Cristóbal solicita a la Junta que desbloquee su entrada en la Mancomunidad de Béjar

El alcalde de Cristóbal, Antonio Luengo, se reunió ayer con el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Salamanca, Bienvenido Mena, para tratar diferentes temas, competencia de la administración regional, en relación con su municipio.

Entre las preocupaciones que se pusieron sobre la mesa destaca la petición, por parte del primer edil, de que la Junta «medie para que la inclusión del municipio en la Mancomunidad del Embalse de Béjar se haga efectiva y el pueblo pueda recibir agua del embalse de Béjar en las mismas condiciones que el resto de municipios incluidos en la agrupación», según informaron ayer desde la Junta a través de un comunicado.

Dicha información fue confirmada por Luengo quien, en conversaciones con este periódico, explicó que «queremos que se cumpla la legalidad» señalando que «llevamos desde el año 2000 recibiendo el agua del embalse de Béjar con una obra que nos hizo la Junta y que nos dejó puesta el agua, pero hemos tenido muchos problemas desde entonces con el presidente de la Mancomunidad y alcalde de Béjar, AlejoRiñones».

Entre estos problemas, según denuncia el primer edil de Cristóbal, estaría que «hace unos años nos cobraban el agua a 63 céntimos el metro cúbico, mientras que el resto la estaban pagando a 13 metros cúbicos, aunque por suerte eso ya se ha solucionado». Además, añade que «empezamos a recibir el agua los pueblos de Molinillo, Santibáñez de la Sierra, Valdelacasa y Cristóbal, los dos primeros entraron como miembros de pleno derecho, pero Valdelacasa y nosotros no, porque decían que teníamos deudas lo cuál se demostró que no era verdad. Luego, empezó a recibir el agua San Esteban de la Sierra y también ha entrado y nosotros seguimos fuera», indica el alcalde, quien considera que esta decisión «es algo personal, no contra el pueblo, pero sí contra mi persona».

Respecto a la posible entrada de Cristóbal en la Mancomunidad del Embalse de Béjar, su presidente, Alejo Riñones, señaló que «no tengo que decir nada, por mi parte no hay ninguna reticencia, encantados de que entren, pero haciendo las cosas bien», extendiendo la solicitud no solo a Cristóbal, sino a los otros tres municipios que reciben agua sin estar mancomunados (Pinedas, Sotoserrano y Valdelacasa). Riñones añadió que, en cualquier caso, la decisión es de la Junta de Castilla y León, que establece unos determinados criterios «entre los que está el no pertenecer a ninguna otra mancomunidad que dé este servicio».

El presidente de la mancomunidad y alcalde de Béjar recuerda, además, que los pueblos mancomunados tienen que hacer frente a una multa impuesta por la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) de 24.000 euros que, asegura, se le ha impuesto a la Mancomunidad por «dar agua a municipios no mancomunados».

Respecto a esta polémica, el alcalde deCristóbal considera que la multa no ha sido exactamente por ese motivo, sino que se debe a que «ahora se consume más agua que la que paga de canon de consumo la Mancomunidad», un problema que, a su entender, se solucionaría «siendo todos miembros de pleno derecho y solicitando una mayor cantidad de agua a la Confederación».

Sin constituir

Cabe recordar que, a día de hoy, la Mancomunidad del Embalse de Béjar sigue sin estar constituida, aunque sus cargos directivos presidencia, vicepresidencia y tesorero sí están elegidos (siendo ocupados todos ellos por ediles de Béjar), puesto que en las reuniones celebradas hasta el momento no se ha reunido al número suficiente de representantes como para poder sacar adelante una votación.

Respecto a esta situación, el presidente de la Mancomunidad y alcalde de Béjar señaló que espera poder constituir la Mancomunidad en la próxima reunión, que se prevé que sea en los próximos «10 o 15 días». Una constitución que, recordó, se hace necesaria para asegurar el suministro de agua a los municipios mancomunados.

Riñones asegura que «los alcaldes están entendiendo la situación», ante las críticas de algunos que aseguran que el rechazo de los alcaldes a asistir a las reuniones de la Mancomunidad se debe a que Béjar ostente el 52% del peso en la misma. «La concesión de 69 litros por segundo de la CHTes para Béjar, que lo pone a disposición de la Mancomunidad, usando la red de distribución de agua de Béjar y los depósitos de El Castañar y Monte Mario, que también se ceden, con todo el agrado, pero para que se entienda, es como si tú me dejas tu casa para vivir, yo no puedo pedirte que pongas las escrituras a mi nombre», explicaba el alcalde de Béjar.

Además del tema de la Mancomunidad, en la reunión con Mena, Luengo también puso sobre la mesa una petición de obras en el tejado del consultorio, la mejora de la depuradora, la colocación de badenes en las dos travesías que atraviesan la localidad para mejorar la seguridad en el pueblo y la desafección de una parte de la escuela para uso municipal, ya que este año se ha cerrado el colegio por falta de alumnos.