Borrar
El trabajo para preparar las casetas es tan intenso como la propia actividad durante los días de apertura.
Los hosteleros confían en que el tiempo acompañe al menos el fin de semana

Los hosteleros confían en que el tiempo acompañe al menos el fin de semana

Coinciden en destacar la importancia de la Feria de Día para mejorar sus cuentas anuales y promocionar sus establecimientos

CECILIA HERNÁNDEZ / DANIEL BAJO / WORD

Jueves, 3 de septiembre 2015, 12:06

Los responsables de las 97 casetas de la Feria de Día de Salamanca, que se inaugura hoy a las 20:00 horas, vivirán los próximos días pendientes del cielo. Algunos hosteleros ven estos días como una oportunidad para cuadrar las cuentas del verano y otros como una forma de promocionar sus platos y sus locales ante miles de personas, pero en lo que coinciden todos es en que si el tiempo no acompaña no hay nada que hacer. «Si la Feria falla el fin de semana, no recupera», explican en una de las casetas de la plaza de Anaya. Según la Aemet, hoy hay un 35% de posibilidades de que llueva, mientras que mañana llegará al 60%.

La preocupación por si llueve o sigue luciendo el sol es universal. «si el tiempo acompaña la gente sale y toma algo en las casetas. Es una tradición», creen en la caseta de Capitolium. En El Zaguán mantienen una opinión muy similar. Javier Sánchez, de La Espannola, lo corrobora: «La gente está con ganas. Todos estamos esperando a la Feria». Y añade que «en verano baja mucho la recaudación y con esto apañamos estos meses», explica el hostelero, que confiesa que «desde el 15 de agosto» esperan que llegue esta cita con el público salmantino.

Entre los hosteleros, no obstante, también se advierte cierto temor a que la Feria de Día esté perdiendo parte de su interés. Coinciden en que los pinchos y las casetas «son lo que mueve a la gente. Hay gente que viene a las Ferias sólo por las casetas», pero algunos también creen que esta actividad ya no es lo que fue y que «va bajando poco a poco. Cada año hay más casetas y la gente se cansa un poco, sobre todo lo mayores, que prefieren estar en un bar, sentados...». En un negocio cercano corroboran que «no es como el primer año. Ha ido para abajo. Hay mucha competencia y menos calidad de los pinchos».

A los temores a que la Feria esté perdiendo fuelle se añade que instalar una caseta no es barato, de ahí las ganas de los hosteleros de que las lluvias aguanten un par de semanas más.

Cada local paga un impuesto de ocupación de la vía pública y los enganches y el consumo de gas y luz, además de los sueldos y los seguros del personal extra que trabaja en las casetas, el montaje de las instalaciones y el alquiler de éstas, si no las tienen en propiedad. Mario Benito Sánchez, de Capitolium, opina que «es como mover un bar y lleva mucho trabajo», y calcula que abrir una caseta conlleva unos 2.000 euros de gastos. «Es una inversión y un riesgo, pero si hay gente siempre vale la pena». Asimismo, hay algunos locales que ven la feria como una promoción de sus establecimientos de cara al resto del año, aunque económicamente no les salga tan rentable. «Muchos nos conocen aquí y luego se acercan a vernos al local», comentaban.

Otras cifras

La Feria de Día, pese a algunas incertidumbres, sigue siendo la actividad más populosa de las fiestas locales.

Las cifras en torno a esta celebración son muy destacables. Según revelaron hace unos días el presidente de la Asociación de Hosteleros, Alain Saldaña, y el concejal de Turismo, Julio López, la Feria de Día generará 650 empleos durante los 13 días que durará. También llama la atención que los organizadores recibiesen 146 peticiones tramitadas para la instalación de casetas, de las que finalmente se concedieron 97.

Una de las novedades más interesantes es que cada local sólo podrá ofrecer cinco pinchos y tres raciones distintas. El precio del pincho de Feria será de dos euros, con caña, mosto, vino o agua incluido. El objetivo de esta limitación de oferta es controlar la calidad de los pinchos y de los productos almacenados.

De igual modo, el concejal reiteró en la presentación de la Feria que nunca se han producido intoxicaciones alimentarias, pero que con esta medida se mejora la prevención de cara al futuro.

Los responsables de algunas casetas aplaudían ayer esta medida, ya que creen que ofrecer una carta de 25 ó 20 pinchos desvirtúa la Feria y coloca a las casetas de bares de copas en desventaja con las que pertenecen a locales especializados en pinchos.

En ese sentido, ayer se respiraba satisfacción entre los empresarios, sobre todo entre aquellos que preparan sus pinchos con métodos diferentes a la tradicional plancha. Sólo queda esperar ya a que esta tarde se dé el pistoletazo de salida a esta carrera culinaria que se desarrollará por toda la ciudad.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla Los hosteleros confían en que el tiempo acompañe al menos el fin de semana