Un rayo deja daños cuantiosos en el camping del Casarito

Si el pasado viernes un rayo cayó parte de la espadaña de la iglesia de La Alberca y provocó daños en su sistema eléctrico, días antes otro había provocado cuantiosos daños en el camping Sierra de Francia, en El Casarito (Nava de Francia) cuando en éste no se encontraba nadie, lo que fue un verdadero alivio para sus propietarios.

El rayo que cayó sobre la zona del bar, calcinando el cuadro eléctrico, «corrió por la tubería del agua hasta que reventó el tubo de cobre en la sala de las calderas de los baños principales del camping, a 150 metros del bar», explica el propietario, quien enumera los cuantiosos daños que esta descarga eléctrica ha provocado en las instalaciones: «nos hemos quedado sin teléfono, sin televisión y sin conexión a internet en la vivienda, además de sin agua; pero la parte más afectada ha sido la del bar». «Cuando llegué y vi que estaba sin luz, fui al bar y al abrir la puerta había un humo intenso. Me asusté mucho, creí que había un incendio. Allí estaba, a oscuras, lloviendo y sin saber qué pasaba. Menos mal que no había fuego, pero sí había habido un pequeño incendio, una explosión en la entrada de la arqueta de la electricidad del bar y en la caja de los fusibles, que se propagó e hizo caer el falso techo, que se desplomó en la zona de la tienda», explica.

Cuando pudo entrar descubrió que todo estaba lleno de un hollín, que impregnaba toda la estancia, el mostrador, las mesas, el suelo... todo estaba completamentamente negro.

Pasados unos días, ya han comenzado con los arreglos, pero aún no pueden cuantificar los desperfectos, que «son muchos», pero tienen que esperar a ir arreglando poco a poco cada uno de los destrozos para ver si ha afectado a algo más.

«La avería de la electricidad afecta a todo el camping y en el bar habrá que empezar desde cero. Tendremos que reconstruir el falso techo, pintar la estancia por completo y reponer todos los aparatos, que se han estropeado», se lamenta, aunque da gracias de que en ese momento no hubiera nadie y no hayan tenido que lamentar daños personales, porque debió de ser «algo horrible» y recuerda el «susto y la incertidumbre» que le embargó al pensar que podía haber ocurrir alguna desgracia.

Cuando sucedieron los hechos, tan sólo tenían gente en un bungalow -que no estaban en ese momento- y que tuvieron que irse un día antes de lo previsto al quedarse sin luz y sin agua.

Ahora, es el perito el que tiene que valorar todos los daños. «Esperamos que la póliza nos cubra los destrozos», explica, a la vez que señala que han comenzado con los arreglos con el fin de tener listas las instalaciones lo antes posible.

Por otro lado, señala que la tormenta no sólo afectó a su negocio, ya que al taller mecánico Navacar que se encuentra también en El Casarito le ha estropeado alguna máquina, y hay otros vecinos que también han sufrido algunas averías, pero parece ser que «el rayo cayó aquí, en el camping». Por ello, han solicitado al Ayuntamiento de Nava de Francia -al que pertenece este entorno- que coloque un pararrayos. «Aunque siempre se toman medidas y se le dice a los clientes lo que tienen que hacer en caso de tormenta, estamos viendo que están afectando de forma seria a la Sierra de Francia, por lo que hay que poner todas las medidas posibles para evitar este tipo de sucesos», concluye.