«Lo esencial es ayudar a las familias a comenzar el proceso de duelo»

Una vez recibida la fatal noticia, comienza el proceso de duelo. Es ahí, en ese momento, en el que el familiar se debate entre la incredulidad, la negación y la necesidad de aceptar lo sucedido cuando aparece como determinante la labor de los psicólogos. Así lo explica la psicóloga voluntaria salmantina que prefiere no dar su nombre- que ha participado en el dispositivo de Cruz Roja Española en el aeropuerto de Barajas con los familiares de la tripulación fallecida en el siniestro aéreo de Mali.

En un caso como este, además, aumenta la incertidumbre y el dolor por lo lejano del suceso y la dificultad para repatriar los cadáveres, una espera que finalmente concluirá hoy, según lo previsto, con la llegada de los cuerpos al aeropuerto madrileño desde Francia, país del que procedían la mayor parte de los fallecidos en este accidente aéreo. «Es una situación difícil, y hay que trabajar también ese aspecto con las familias, hacerles entender que tienen que esperar, pero esa demora lo complica todo más», añade la voluntaria, que partió junto a un compañero socorrista el domingo hacia Madrid donde hicieron noche y apoyaron a sus compañeros de la capital en esta labor, que se extenderá hasta el sábado, 2 de agosto.

«Lo fundamental es estar ahí», señala. Y es que, en muchas ocasiones, la labor voluntaria de estos profesionales se limita a ser una presencia firme, un recurso al que familiares y amigos de las víctimas pueden acudir si así lo necesitan. En el caso que nos ocupa, destacan los salmantinos, se han encargado también de hablar y apoyar a los trabajadores de la compañía Swiftair, compañeros de los fallecidos, que se encuentran en Barajas junto a las familias.

La importancia de los amigos

De igual modo, han estado arropando a los familiares amigos de las víctimas, algo usual, señalan los psicólogos, en casos como este, en el que los muertos son gente joven y profesional, con una amplia red social. «Esto también ayuda a las familias a la hora de comenzar el duelo, el consuelo de saber que sus allegados eran personas queridas y reconocidas, que tenían muchos amigos y gente que los apreciaba».

Ese inicio del proceso de duelo es la parte más delicada, ya que los afectados pueden reaccionar de diferentes maneras, desde el shock a la incredulidad pasando por etapas de ansiedad, angustia y culpabilidad, pero es algo esencial para que no se queden bloqueados. «Nosotros hacemos mucho hincapié también en el descanso, que es esencial porque el cuerpo recoge todas las sensaciones, y aunque no les apetezca tienen que reposar, comer e hidratarse», recalca la psicóloga.

En los últimos años estos equipos de intervención en emergencias de Atención Psicosocial que así es su nombre técnico- han intervenido desde Salamanca en distintos sucesos como el accidente ferroviario de Santiago de Compostela del año pasado, el accidente minero de León, a finales de 2013, el terremoto de Lorca de 2011 y el accidente aéreo ocurrido en Barajas en 2008, entre otros. Incluso en 2010 se participó por primera vez en una emergencia internacional, desplazando personal a Chile, a consecuencia del terremoto que afectó a aquel país en febrero de ese año. Allí se formó al voluntariado local. Asimismo, el equipo voluntario de atención psicosocial interviene en situaciones de violencia de género.