elena gómez / word
Jueves, 26 de junio 2014, 10:51
La primera gala solidaria por el colegio La Inmaculada de Armenteros, celebrada el pasado viernes día 20, fue todo un éxito, según indicaron ayer el actual presidente del centro, el conocido párroco Blas Rodríguez; la concejala de Cultura de Guijuelo, Marian Picado, y la animadora sociocultural del Centro Cultural de Guijuelo, Mercedes Martín, en el acto de entrega de la recaudación de dicha gala solidaria.
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Un total de 602 euros y varias cajas grandes llenas de productos alimentarios, especialmente de aquellos destinados al desayuno, son el resultado de esta gala benéfica, que cerró las actividades del curso lectivo en el Centro Cultural de la villa chacinera, que ahora se prepara para albergar las actividades de verano.
En esta gala actuaron los alumnos y profesores de la escuela municipal de danza de Guijuelo que, como cada año, presentaron su espectáculo final de curso. Si bien otros años este espectáculo es gratuito, en esta ocasión quisieron organizarlo de manera que los asistentes aportaran una entrada de tres euros (como mínimo) o tres kilos de alimentos, destinando el total de la recaudación a ayudar al colegio La Inmaculada de Armenteros, que actualmente no está pasando por su mejor momento y que, incluso, ha visto como este último curso lectivo ha tenido que cerrar como centro educativo, quedando solo como internado.
La iniciativa de hacer una gala benéfica, según explicó la concejala de Cultura, Marian Picado, «surgió hablando con Julio, con el profesor de baile, que me lo propuso y me pareció una idea muy buena, que nunca habíamos hecho aquí y que podríamos aventurarnos a hacerla». Además, asegura que la idea de destinar los fondos al colegio La Inmaculada de Armenteros vino de «una conversación que tuve con Blas, en la que me había comentado como estaba la situación y pensé que debía ser para ellos».
La edil se mostró muy satisfecha con el resultado, especialmente «porque era la primera vez y no sabíamos cómo iba a salir, pero viendo los resultados y que la gente ha colaborado muy bien, estamos encantados». Además, añadió que, por parte del Ayuntamiento, «si podemos echar una mano a cualquiera que realmente lo necesite estamos abiertos a cualquier propuesta, porque para eso estamos, para ayudarnos unos a otros».
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Por su parte, Blas Rodríguez hizo un balance «muy positivo, porque esto demuestra que Guijuelo está muy sensibilizado, y cada vez más, con una realidad que es muy nuestra como es el colegio La Inmaculada de Armenteros, que lleva funcionando casi 60 años y que ha cumplido y cumple una labor social muy importante».
Rodríguez señaló que «en estos momentos el colegio está pasando por una situación muy delicada, pero con el apoyo y la solidaridad de todos, en especial de esta comarca nuestra, estoy seguro que podemos salir adelante».
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El actual director del centro señaló que se ha pedido especialmente alimentos de desayuno porque «es muy importante que los niños empiecen el día con una buena alimentación» y aseguró que, con el dinero recaudado, «podemos pagar tranquilamente el pan de todo el mes, que parece un pequeño detalle, pero es muy importante para nosotros».
Cooperación mutua
Ésta no es la primera vez que el pueblo de Guijuelo se vuelca con el colegio La Inmaculada de Armenteros y es que, recientemente, se sorteó un cuadro en beneficio del centro. «En aquella ocasión fueron 500 euros, hoy son 602, con eso ya tenemos casi para una beca para un chaval durante un año», aseguraba el párroco.
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En relación a esto, quiso «abrir la puerta a aquellas necesidades que pueda haber aquí en Guijuelo, de chicos o chicas que necesiten el colegio y la residencia de Armenteros, que puedan disfrutarla», y es que con estas últimas recaudaciones en la villa chacinera, «a uno de estos chicos de Guijuelo lo podríamos mantener allí durante todo el año sin ningún tipo de problema», aseguró, añadiendo que cree que «si nos ayudamos unos a otros la labor puede ser preciosa».
Ante la difícil situación que atraviesa ahora el colegio de Armenteros, que ha subsistido sobre todo gracias al trabajo de una quincena de voluntarios, cualquier iniciativa que sirva para recaudar fondos para que el centro siga adelante -y para la apertura, de cara al próximo curso escolar de la Educación Primaria como centro privado- es bien recibida.
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«Estamos abiertos a todo tipo de iniciativas», aseguró Blas Rodríguez quién señaló que «en el pueblo de Santa Teresa, cuando se han enterado un poco de la situación, quieren hacer un mercadillo en verano para echarnos una mano». Además, no descarta tirar de imaginación y de sus famosos carros -que han recorrido toda la comarca y han salido en numerosas ocasiones de ella-, asegurando que «a lo mejor un día los sacamos y hacemos una especie de comercio solidario de un lado para otro, recogiendo productos en un lado y vendiéndolos en otro, a ver si con todo eso vamos consiguiendo una beca un día y otra otro día», sentenciaba.
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