Víctor Meseguer y la colectivización del gol en el Real Valladolid

La situación ahora es otra. En el pujante Pucela actual, no existe un realizador destacado y sí una miríada de anotadores en pequeñas dosis.

El gol se ha colectivizado en un equipo que camina con paso firme hacia el ascenso directo. Mamadou Sylla se mantiene como el máximo anotador del Pucela a falta de cuatro jornadas para el final con siete tantos. Le siguen Víctor Meseguer y Monchu Rodríguez, con seis. Amath Ndiaye ha marcado cinco. Sergio Escudero y Marcos André suman tres cada uno… Y la lista sigue hasta alcanzar los 17 jugadores que pueden presumir este curso de haber anotado con la camiseta del Real Valladolid, el último de ellos Raúl Moro, que se estrenó con un golazo la pasada jornada en la victoria a domicilio ante el Mirandés (0-1).

A los delanteros les gustaría exhibir, a buen seguro, cifras más nutridas, incluso estrenarse ante las porterías contrarias, como sucede con Álvaro Negredo, un ariete que aún no ha marcado en los 439 minutos que ha jugado con el Pucela tras su llegada en invierno. Sin embargo, la pluralidad de goleadores favorece a jugadores de segunda línea, como los centrocampistas Meseguer y Monchu, aspirantes a acabar la competición como 'pichichis' del equipo si están acertados en esta faceta en el decisivo tramo final.

Víctor Meseguer, por ejemplo, ya ha ganado alguna apuesta personal que mantenía internamente con miembros del 'staff' blanquivioleta. El futbolista murciano se fijó como meta alcanzar las seis dianas y, al finalizar el prodigioso mes de abril, ya había llegado al objetivo. «Sí, a alguno del cuerpo técnico le dije que quería hacer seis goles. Hombre, si puedo marcar ahora alguno más, pues mucho mejor. Lo importante es ganar y ayudar al equipo», apuntó Meseguer este miércoles en la sala de prensa de Zorrilla, después de recoger el premio al Jugador Estrella Galicia del mes de abril, galardón que otorgan los aficionados.

Dentro del vestuario, existe una especie de 'competencia' para ver quién acaba liderando al equipo en esta faceta. Lo apunta Víctor Meseguer: «No hay pique, pero sí que hay comentarios… O por lo menos lo piensas. 'Si haces otro, pillas a Sylla, que es el máximo realizador de la plantilla'. Es un pique sano para hacer goles. Da igual quién los haga ahora. Lo importante es lograr el objetivo», subraya.

Con Sylla (siete goles) y Amath (cinco tantos) aún en proceso de recuperación tras sus lesiones, los hexagoleadores Meseguer o Monchu podrían finalizar la campaña como máximos anotadores de un Pucela que ahora mismo depende de sí mismo para coronar el ascenso directo.

El mes de abril no pudo resultar mejor para un Real Valladolid que ganó todos sus partidos y que prolonga su racha triunfal con el inicio de mayo. Víctor Meseguer se ha convertido en una pieza clave de todo el entramado táctico en este tramo final. «He podido ayudar al equipo con goles en este tramo. Aún queda el último mes y espero que nos vaya igual de bien», confía.

En la mejor versión colectiva del Pucela (y también de Meseguer y Monchu de manera individual) desempeña un papel clave la irrupción de Lucas Oliveira como mediocentro y vértice trasero del triángulo en la medular. El brasileño apareció como titular en esta demarcación por delante de la defensa en el encuentro ante el Cartagena. Ese fue el inicio de la racha actual de cinco victorias en la que el equipo no ha encajado goles. «Lucas nos ha dado mucho en esa posición, sobre todo con balón. Es un jugador que filtra muchos pases hacia adelante cuando tiene la pelota y también nos aporta mucho posicionalmente. Ha hecho que Monchu y yo nos liberemos y que nos lleguen mas balones», detalla Meseguer.

El Real Valladolid afronta este sábado otro reto muy exigente, esta vez ante un Espanyol que llega seis puntos por detrás del Pucela y apurando sus opciones para luchar por el ascenso directo. Meseguer apuesta por «salir a por ellos, sin tener miedo». «Estamos muy bien. Recuperamos a futbolistas que estaban sancionados. Esperamos hacer un buen partido ante nuestra afición y lograr los tres puntos. Nosotros podemos afrontarlo con algo más de tranquilidad, porque tenemos una ventaja de tres puntos (sobre el tercer clasificado), pero no nos podemos relajar. Debemos salir a por los tres puntos y jugar con la presión que pueden tener ellos por la necesidad de ganar o quedarse fuera del ascenso directo. Hay que jugar con eso».

Víctor Meseguer mira ahora hacia atrás y recuerda la sensación que existía en el vestuario el pasado 17 de marzo, cuando el Real Valladolid cayó con mala imagen en el campo del Racing de Ferrol y todo pintaba muy negro. Entonces apareció la capacidad de resiliencia. «Aquel partido fue complicado, un encuentro muy malo para nosotros. Salimos muy dolidos. Pero lo bueno que ha tenido este equipo es que ha superado las rachas malas con otras buenas. Quizá no esperábamos esta racha tan duradera, pero esto es fútbol, hemos logrado hacerlo, estamos con confianza y queda un pasito más para conseguirlo».

El apoyo de un Zorrilla a reventar resultará clave también el próximo sábado ante el Espanyol, en una comunión creciente entre grada y equipo. «Cuando los resultados acompañan todo es más fácil. La afición ahora nos está ayudando. Nosotros lo notamos y podemos jugar con ese empujón que nos dan. Cuando la afición está de tu parte, va a verte y te apoya, todo es más fácil. Y si encima salen los resultados, todo resulta mejor», destaca Meseguer, un futbolista que ha encontrado en este Real Valladolid colectivizado ante el gol los mejores registros realizadores de su carrera profesional.