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Los jugadores de la selección catalana y de Venezuela pugnan por el esférico en el partido disputado el pasado lunes. Robin Townsend-EFE
Valores y respeto

Valores y respeto

El autor del texto reflexiona sobre lo acontecido en las redes sociales después de que el Real Valladolid impidiese a Sergio, Masip y Alcaraz acudir a la llamada de la selección catalana

Juan Ángel MÉndez

Martes, 26 de marzo 2019, 22:02

Twitter es, grosso modo, la barra de bar posmoderna, donde desconocidos se enzarzan en conversaciones vacías de contenido y cuajadas de demagogia barata, sobre todo en fútbol y política. Es el universo de la posverdad más absurda. Cualquiera puede increpar al de enfrente con la ... autoridad de quien se siente impune o la inquina del que se oculta tras el cobarde anonimato. Lo fácil. Hay que tener claro el concepto para entender situaciones como las que se han dado esta semana, cuando el Real Valladolid comunicó su negativa a ceder recursos para simulacros autonómicos de partidos pseudo-internacionales. Tras su decisión, brotaron otras con idéntico signo de clubes que también se juegan su futuro en los próximos días. No hay que ser muy listo para entender esto, pero resulta mucho más sencillo reducirlo todo al complejo de inferioridad propio y a la pedrada para justificar que la decisión forma parte de un complot anticatalán. Decirlo en la barra de un bar acota el recorrido de la provocación y a veces desemboca en una colleja educativa, pero buscar el conflicto en una red social multiplica la crispación gratuita que persiguen los 'haters' ávidos de unos 'likes' de gloria. Una pena.

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