Toni Villa y Anuar, el triunfo de la cantera del Real Valladolid

«Llevamos arrastrando muchos partidos fuera de casa con buenas sensaciones, pero nos faltaba esa pizca de suerte para conseguir la victoria», declaró Anuar en Cartagena, feliz tras anotar el 2-3 final que permitió al equipo sumar una importantísima victoria fuera de casa y engancharse a la cumbre de la tabla. El ceutí entró en el campo en el minuto 64 para relevar a su amigo Toni Villa, que brilló a gran nivel y había marcado el 0-1 a los 14 segundos de encuentro. Al final del partido, exultantes con el triunfo y su gran aportación individual, los dos canteranos se fotografiaron en el túnel de vestuarios de Cartagonova.

Toni logró su cuarta diana de la temporada e incrementó su mejor marca realizadora en categoría profesional. En Segunda B, con el Real Valladolid Promesas y con la Cultural, marcó cinco en las temporadas 2014-2015 y 2016-2017, cifra global que ya tiene a tiro. Brillante en este tramo de la temporada, Toni se ha adueñado de la banda izquierda del ataque, con incursiones mortíferas hacia adentro que mantienen el fuelle ofensivo del Pucela de José Rojo 'Pacheta'. Ante el Cartagena, ejecutó dos disparos a portería (uno fue gol), dio veinte pases, participó decisivamente en la jugada del tanto de Weissman y recibió tres faltas, la última de ellas al mismo borde del área de Marc Martínez, antes de ser relevado por Anuar en el minuto 64.

Pacheta retiró al mejor futbolista de campo del Real Valladolid (que tenía una amarilla) para dar entrada a Anuar, también en posición escorada. El ceutí tiene gran competencia en el centro del campo, donde Roque Mesa, Álvaro Aguado y el recién llegado Monchu Rodríguez ofrecen un alto grado de competencia. Anuar, que pudo salir en el pasado mercado invernal, aprovechó al máximo sus 26 minutos. Tocó 16 balones, con un acierto en el pase del 67%. Y, por supuesto, marcó el gol de la victoria blanquivoleta con una gran definición tras un pase de Óscar Plano.

Toni Villa y Anuar Mohamed Tuhami se conocieron en el verano de 2010 en la Residencia de Jugadores del Real Valladolid. Separados solo por ocho días (Toni nació el 7 de enero de 1995 en Lorquí, Murcia; Anuar vino al mundo el 15 de enero de 1997 en Ceuta), las dos jóvenes perlas de la cantera sintonizaron a la perfección. Anuar llegó a los Campos Anexos en el verano de 2008 para integrar el Infantil A. Dos años después se incorporó Toni Villa. Anuar ejerció de 'integrador' y los dos jóvenes futbolistas compartieron habitación (la 107) en la Residencia del Pucela. Allí mantuvieron algunos secretos que hicieron que aumentara su popularidad entre los compañeros: Anuar compró a hurtadillas un pequeño televisor y Toni una PlayStation, que escondían en una maleta, y por las noches organizaban partidas del FIFA y el Call of Duty a espaldas de los responsables de la Residencia. Años después, los dos futbolistas lo recordaron entre risas.

Sus camisetas destacan en las paredes del edificio y sirven como estímulo a las nuevas generaciones de canteranos. La de Toni aparece con una dedicatoria: «Para la mejor familia que se puede tener en la Resi y en especial para mi amigo Pereira. Con cariño». Juan Carlos Pereira sigue en la estructura de la cantera blanquivioleta y actualmente entrena al Juvenil B.

Toni dedicó su cuarto gol de la temporada a su hija recién nacida. El murciano fue padre por primera vez el pasado 14 de febrero y, al día siguiente, ya estaba de vuelta en los entrenamientos a las órdenes de Pacheta. En Cartagena, su hija recibió una dedicatoria especial: tras marcar a los 14 segundos, Toni se llevó el pulgar a la boca en el universal gesto de chupete. Anuar, cuya hija nació en marzo del año pasado, también tuvo ocasión de estrenarse como goleador en Liga en Cartagonova (en Copa marcó ante Las Palmas el pasado mes de diciembre y ejecutó el mismo gesto de chuparse el pulgar).

Para llegar al punto actual, Anuar tuvo que salir cedido al Panathinaikos griego (2019-2020) y al APOEL Nicosia chipriota (2020-2021). Toni Villa también tuvo que foguearse a préstamo, aunque más cerca, en la Cultural Leonesa, durante la campaña 2016-2017.

En partidos oficiales con el primer equipo del Real Valladolid (Liga, Copa y 'play-off' de ascenso), Toni alcanza los 141 encuentros, en los que ha marcado 13 goles, cuatro de ellos esta campaña, la más eficaz ante las porterías rivales. Anuar ha disputado 96 partidos, con cinco tantos en su haber (uno de ellos en Primera División ante el Real Madrid).

Los sueños infantiles de los dos amigos se van cumpliendo. El trabajador Anuar, cuyo ídolo de niño era Ronaldo Nazário (hasta se cortaba el pelo como él), ve ahora cómo el legendario futbolista, convertido en propietario y presidente del Real Valladolid, publica en sus redes sociales fotografías de su último gol ante el Cartagena. De chaval, Anuar también admiraba a Álvaro Rubio, con el que acabó compartiendo vestuario en el primer equipo y que ahora ejerce como tercer entrenador en el cuerpo técnico de Pacheta.

Toni Villa, un futbolista con un talento natural y admirador de Andrés Iniesta, ha mantenido siempre la confianza en sí mismo, aunque en su carácter también late cierto componente pesimista. «Si te pones en lo peor, sabes que las cosas no pasarán de ahí. Lo malo no me sorprende y recibo lo bueno con el doble de alegría», dijo durante una entrevista con El Norte en 2017. Ahora tiene múltiples motivos para alegrarse. Juega, brilla, marca a los pocos días de ser padre y ve cómo su amigo Anuar también anota goles decisivos para el Real Valladolid. La vida y el fútbol sonríen a Toni y Anuar, aquellos chavales que compartían sueños y travesuras en la habitación 107 de la Residencia de Jóvenes Jugadores. La cantera del Pucela se reivindica a lo grande.