Situación difícil para Marcos André en el Real Valladolid

La decisión de Pezzolano contrasta con la percepción interna previa de otros estamentos del club. Según las fuentes consultadas, en Marcos André no se había detectado desgana en los entrenamientos ni tampoco falta de compromiso en el día a día. De hecho, se entendía que se ejercitaba con la misma implicación y esfuerzo que los demás. Además resulta destacable que Marcos André complemente las sesiones matinales colectivas con un preparador personal con el que trabaja por las tardes para afinar su tono físico.

La situación se complica por la relación entre el entrenador y el futbolista. Pezzolano ha dejado claro en sus comparecencias que no obtiene de él lo que busca y ha detallado públicamente que necesita que Marcos André apriete «más», algo que también demanda a otros jugadores con mucho nombre como Darwin Machis y Robert Kenedy, pesos pesados que no tienen el impacto esperado. Marcos André ha entendido estas palabras como un signo de que ha perdido el favor del entrenador y que tendrá complicado sumar minutos de manera constante con el uruguayo al frente del banquillo… o salvo que la situación se enderece.

En la lista inicial que Pezzolano transmitió a la dirección deportiva de futbolista con los que no contaba para este curso no aparecía el nombre de Marcos André y en las conversaciones de las últimas semanas entre técnico y jugador (una de ellas a puerta abierta el pasado 14 de octubre), el entrenador tampoco le manifestó desagrado con su trabajo.

Una salida este invierno se contempla como algo inviable desde casi todos los puntos de vista ya que Marcos André dispone de una alta ficha que no asumiría ningún club… y menos si no destaca previamente con el conjunto blanquivioleta. El brasileño firmó un contrato de cinco años en el verano de 2023, por lo que su vinculación con el Pucela se extiende hasta 2028. Además, Marcos André aceptó el pasado verano una importante rebaja en sus emolumentos para que el Real Valladolid pudiera cumplir con las reglas del 'fair play' financiero tras el ascenso a Primera, algo que también hicieron Darwin Machis y Robert Kenedy (otros futbolistas, con salarios menores, se negaron a esta opción y mantienen las fichas firmadas originariamente). La rebaja en las cantidades que percibirá Marcos André no afecta únicamente a esta campaña sino a todas las temporadas firmadas hasta 2028.

Las únicas opciones que se contemplan en este momento para que Marcos André tenga alguna opción de salir se enfocan a medio plazo: una reversión de los acontecimientos (una gran temporada del brasileño que pueda permitir su venta el curso que viene) o una cesión a otro club en la que el Real Valladolid asuma buena parte de su ficha, pero siempre a partir del próximo verano.

Marcos André se encuentra físicamente bien a pesar de la falta de tiempo de competición esta campaña. Hasta el momento, sólo ha jugado 253 minutos repartidos en cinco partidos (únicamente tres como titular: a domicilio frente a Real Madrid, FC Barcelona y Sevilla). El último encuentro que ha disputado llegó ante el Rayo Vallecano en Zorrilla, choque en el que saltó al campo tras el descanso para jugar la segunda mitad y en el que se mostró batallador arriba, aunque no llegó a rematar a puerta.

Próxima cita ante Osasuna

Habrá que comprobar si Paulo Pezzolano incluye a Marcos André en la convocatoria para jugar este sábado en El Sadar frente a Osasuna, en un partido de máxima exigencia. El delantero brasileño puede ver aumentadas sus opciones de disponer de minutos si Juanmi Latasa no se recupera de los problemas en el tobillo derecho que le obligaron a retirarse en la primera parte del choque copero frente al Astur del martes (en esta primera eliminatoria el canterano Chuki le suplió arriba), aunque Mamadou Sylla se ha convertido en el titular en Liga en los últimos dos compromisos, en los que ha anotado sendos goles de penalti.

Marcos André, de 28 años, volvió el verano de 2023 a Zorrilla tras dos campañas en el Valencia, club al que fue traspasado por el Real Valladolid en el verano de 2021. Con el Pucela marcó cuatro tantos en Primera División antes del descenso de categoría del club blanquivioleta y su venta al conjunto che por 8,5 millones (antes del traspaso marcó un tanto en Segunda en la primera jornada). La venta no gustó entonces a la afición blanquivioleta, que contemplaba a Marcos André como una pieza clave para luchar por la vuelta a la élite.

El curso pasado, el ariete brasileño recaló de nuevo en propiedad en el Real Valladolid, tras un nuevo descenso a Segunda División, como gran refuerzo ofensivo para buscar la vuelta exprés a la máxima categoría. Marcos André marcó dos goles antes de pasar por el quirófano el 3 de noviembre de 2023 debido a una lesión que padecía en el tendón de Aquiles del pie derecho y que frenó su progresión. Tras su vuelta en febrero, anotó otro tanto ante el Amorebieta en la jornada trigésima sexta.

Marcos André vive ahora tiempos complicados en lo profesional. Sin el favor de Pezzolano, sus oportunidades para brillar pasan por confiar en que su situación cambie de alguna manera.