Real Valladolid y Leganés, dos clubes casi gemelos

Aunque en los albores del siglo XX ya se habían fundado numerosos equipos, e incluso algunos en el último cuarto del XIX, fue después de la Olimpiada de Amberes 1920, en la que el fútbol cosechó medalla, cuando el futbol se hizo enormemente popular en nuestro país y proliferaron como setas los clubs de fútbol.

En Valladolid, donde intramuros jugaban los seminaristas de los colegios de Ingleses y Escoceses antes que en cualquier otra parte del país, aparecieron numerosos equipos amateurs en cuarteles, centros de enseñanza y diversas instituciones, aunque los únicos que pervivieron en el tiempo fuesen la Real Unión Deportiva Luises y el Club Deportivo Español que, cansados de la rivalidad que protagonizaron, decidieron unir sus fuerzas y fundar el Real Valladolid Deportivo.

Ocurría este hecho el 20 de junio de 1928, con gran repercusión mediática en los periódicos de la ciudad y, probablemente, alguna referencia pequeña en los de tirada nacional. Seguramente, quien no generaría ninguna información al respecto de su fundación fue el Club Deportivo Leganés, pues en esta localidad situada al sur de Madrid, no había periódico para recoger el dato y los de la capital no acostumbraban a hacerse eco de lo que ocurría en los pueblos, salvo que se tratara de sucesos truculentos.

Pero sí quedó constancia escrita en los libros de actas correspondientes de la fundación del Club Deportivo Leganés, que tuvo lugar el 23 de junio de 1928, tres días después de que naciera el Real Valladolid. O sea, que por tan escaso margen de tiempo, pucelanos y pepineros no son hermanos gemelos.

El Leganés nació, eso sí, con menos aspiraciones que el Valladolid, ya que éste fue inscrito en el campeonato de Liga de segunda división, seguramente por la tradición que este deporte tenía en la capital de Castilla y León, mientras que el Lega participó en las competiciones inferiores de la categoría de aficionados, regidas por la Federación Centro, en la que se inscribió.

Con la guerra civil, especialmente dura en Madrid y alrededores, perdió toda actividad e incluso desapareció como entidad deportiva, refundándose el 4 de septiembre de 1946 con las mismas aspiraciones modestas, pues tuvieron que pasar treinta y dos años hasta lograr el primer ascenso a tercera división, y quince más, en 1993, para dar el salto a segunda, toda una hazaña para un equipo humilde que carecía de respaldo económico y social para aspirar a metas más altas.

Tras once temporadas consecutivas en la división de plata, bajó a segunda B con un panorama tan desesperanzador que a los socios del conjunto blanquiazul, les pareció una solución que apareciese el productor musical argentino, Daniel Grinbank -que también estuvo en tratos para comprar el Real Valladolid entonces propiedad de las hermanas Saralegui-, en plan salvador del club. Colocó a dos paisanos y amigos, Pekerman y Carlos Aimar, al frente de una plantilla casi íntegramente formada por futbolistas sudamericanos, pero solo bastaron unos meses para descubrir el fiasco, ya que ni siquiera había desembolsado el dinero de la compra del club.

Menos mal que en apareció el empresario Felipe Moreno, que compró la sociedad, se hizo cargo de las numerosas deudas y colocó como presidente a su esposa, María Victoria Pavón, en la presidencia para protagonizar una ejemplar tarea, tanto en los económico como en lo deportivo. El C.D. Leganés volvió a segunda en la 2013-14 y dos años después hacía realidad el sueño de alcanzar la primera división, algo impensable durante los ochenta y ocho años de vida precedentes.

El Leganés, que sigue en primera división con una estructura perfectamente consolidada, constituye un ejemplo de superación digno de encomio. Tras una vida de penurias ha podido cumplir noventa años entre los grandes de una de las mejores ligas de fútbol del mundo.

Y ahí, también, se encuentra su hermano «casi» gemelo, el Real Valladolid, que cuenta con una trayectoria mucho más importante, con 44 temporadas en la máxima categoría, motivo por el que a pesar de haber nacido al mismo tiempo, han tardado muchos años en encontrarse en un terreno de juego, concretamente en la temporada 2014-15, cuando ambos militaban en segunda división.

En cambio, sí ha habido un buen número de jugadores que han defendido los colores de ambos equipos: Alfonso Serrano, Canabal, Makukula, Iván Zarandona, Julio Iglesias, Fernando, Pachón, Antonio López, Víctor, Vivar Dorado, Alberto Bueno, Timor, Sastre, Rubén Peña, Jose Arnaiz y, el más reciente, Lunin.

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