El Real Valladolid trata de acostumbrarse a vivir en una situación de crisis, pero el descontento social va en aumento. Las tres últimas derrotas en Zorrilla han enrarecido el ambiente en la grada y para este domingo hay anunciadas pitadas constantes contra la gestión del club ... de las que los jugadores tratarán de abstraerse en un partido de alto voltaje ante el Athletic Club (18:30 horas). El Pucela necesita sumar de manera urgente o, al menos, mostrar una versión más sólida y competitiva que le permita ir sorteando una crisis que, hasta el momento, no ha puesto en entredicho la labor de Paulo Pezzolano al frente del banquillo desde las altas esferas. Sin embargo, el crédito no es eterno en el fútbol y, sin una reacción clara, la cuerda del banquillo puede romperse en cualquier momento. En el último choque a domicilio ante Osasuna (derrota por 1-0) no se produjo la mejoría esperada, aunque el marcador en contra resultase mínimo.
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Las necesidades acucian mucho a un Real Valladolid que ya ha visto cómo la UD Las Palmas, hundida con Luis Carrión, pega brincos en la tabla tras el cambio de técnico y la llegada de Diego Martínez. Los rivales de la zona baja empiezan a encontrar combustible y el Pucela también necesita ir cargando el depósito para evitar que un agravamiento de la crisis de resultados arrastre el proyecto.
Aun sin el lesionado Iñaki Williams (fuera de la convocatoria), el Athletic Club no parece el mejor rival para salir de la quema y menos si la grada de Zorrilla empieza a entrar en combustión crítica. Sin embargo, el Real Valladolid ha logrado sobreponerse a situaciones hostiles en el pasado reciente (el ascenso del curso anterior resulta paradigmático) y logró dar la campanada a domicilio con una victoria ante el Alavés (2-3) que le insufló oxígeno en medio de una ristra de derrotas (ocho en doce jornadas) difícil de digerir para todos.
Real Valladolid Hein; Luis Pérez, Javi Sánchez, Cenk, Lucas Rosa; Mario Martín, Cömert, Amallah; Raúl Moro, Sylla y Anuar.
Athletic Club Agirrezabala; De Marcos, Vivian, Yeray, Yuri Berchiche; Ruiz de Galarreta, Unai Gómez; Nico Serrano, Berenguer, Nico Williams; y Djaló.
Árbitro Cordero Vega (comité cántabro), con Figueroa Vázquez en el VAR.
Estadio, hora y TV José Zorrilla, 18:30, Movistar LaLiga TV
La receta de Pezzolano para evitar que la situación se agrave pasa por recuperar la versión más sólida como local, reducir espacios mediante el sellado de líneas, y cortocircuitar, en la medida de lo posible, a un Athletic Club que se huracana por momentos para someter a sus rivales con llegadas fulgurantes. El objetivo pasa por domar a unos leones cuyos zarpazos pueden resultar mortales. Si no lo logra, la crisis aumentará en Zorrilla.
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El Pucela llega a esta cita como penúltimo clasificado con ocho puntos, una cifra muy pobre. El Athletic comparece en plena pugna por los puestos europeos y comienza la jornada como sexto en la tabla con 18 puntos, aunque ha visto su andadura en liga frenada en los últimos partidos con sendos empates ante Mallorca (0-0) y Betis (1-1). Sin embargo, el último encuentro de la Liga Europa permitió al cuadro de Ernesto Valverde un chute de confianza, con una remontada fuera de casa fraguada con dos goles en un minuto ante el Ludogorets búlgaro.
En el Real Valladolid Paulo Pezzolano dispone de todas sus piezas sanas, a expensas de la recuperación total del delantero Juanmi Latasa, que puede volver a la lista si se cumplen las previsiones del técnico. La buena noticia para el entrenador blanquivioleta pasa por la disponibilidad de Cenk Özkacar, lo que añade fondo de armario al eje de la zaga, una demarcación asaeteada por las lesiones en semanas anteriores. En condiciones normales, Cenk relevaría a David Torres para formar pareja con Javi Sánchez... salvo que Pezzolano se decante hacia otras opciones
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El Real Valladolid necesita más fortaleza defensiva, minimizar errores graves que acaban costando muy caros y mostrar más proyección ofensiva, especialmente en su versión como local, además de exhibir más colmillo competitivo en los duelos sobre el césped. La lista de tareas pendientes es larga para un equipo al que se le han visto demasiadas costuras y que hoy tratará de reducir el espacio de batalla para que el Athletic no corra a sus anchas. En este sentido, las ayudas defensivas resultarán vitales si el Real Valladolid quiere obtener algo positivo de la visita de los leones a Zorrilla, más allá de que en ataque pueda encontrar la manera de llegar con éxito al área de Julen Agirrezabala. El Athletic ha sumado 18 goles en 12 jornadas y ha encajado 12. El Pucela presenta nueve dianas a favor y 24 tantos en contra.
Ernesto Valverde tendrá que hacer cambios de manera obligada en el ataque bilbaíno ya que Iñaki Williams causa baja para el choque de este domingo por una «sobrecarga en la musculatura isquiosural de su pierna izquierda», según apuntó el parte médico emitido por el club rojiblanco. Esto priva a Valverde de una de sus grandes armas ofensivas, aunque la gran forma que exhibe su hermano Nico Williams mantendrá la amenaza visitante. Además, Oihan Sancet no entró finalmente en la lista de convocados por el esguince que arrastra en un tobillo y que ya le impidió jugar en Bulgaria.
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«El Real Valladolid es un equipo que intenta jugar y se despliega bien. Tiene jugadores de calidad y argumentos. Nosotros tenemos que estar atentos y enfocar bien el partido una vez que hemos pasado el encuentro del jueves. Ahora tenemos que volver a reactivarnos. Eso es lo más difícil. Sacaremos gente fresca con la idea de mantener nuestro nivel», anunció el entrenador del Athletic Club.
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