El Real Valladolid se pone a prueba en El Molinón

El cuadro blanquivioleta se agarra a varios factores para pensar que dará a una alegría a la afición pucelana. Por un lado, están las propias características del Sporting, un rival que, al menos sobre el papel, planteará un partido de tú a tú, no se cerrará tanto ante su público, y permitirá que el Pucela pueda desarrollar el juego que desea. Así lo vio Paulo Pezzolano en su comparecencia del jueves: «Con espacio, todo nos va a favorecer», apuntó el técnico blanquivioleta. Por otro, habrá que ver si el entrenador es capaz de ampliar el catálogo de opciones ofensivas y lograr que el juego también fluya entre líneas durante las fases que los rojiblancos opten por guarecerse. Pezzolano quiere un Pucela más versátil arriba para que los rivales no dispongan de antemano de la fórmula para bloquear las llegadas por banda.

Además, aparecen los precedentes de las recientes visitas a El Molinón. El Real Valladolid no ha perdido en los seis últimos desplazamientos al estadio del Sporting. En este escenario se impuso el equipo de Pacheta por 1-2 en la campaña 2021-2022, venció el Pucela de Sergio González en la vuelta de las semifinales del 'play-off' del curso 2017-2018 por 1-2, empataron a uno las escuadras dirigidas por Luis César Sampedro (2017-2018) y Joan Francesc Ferrer 'Rubi' (2014-2015), técnico que también se impuso en Copa ese curso por 1-3. En el final de la campaña 2009-2010, el Pucela de Javier Clemente venció por 0-2 en El Molinón en Primera. Aunque históricamente los enfrentamientos a domicilio frente al Sporting resultaban favorables a los locales, la tendencia cambió a mediados de los noventa y el Real Valladolid ha obtenido buenos resultados allí desde entonces en líneas generales.

El Sporting llega a esta cita con la moral alta después de imponerse al Real Oviedo en el derbi asturiano de la última jornada por 1-0. Este resultado ha permitido al conjunto de Miguel Ángel Ramírez olvidar las dos derrotas precedentes ante el Real Zaragoza (3-0) y en El Molinón frente al pujante Racing de Ferrol (1-2). Los asturianos permanecieron cinco partidos sin ganar durante el mes de diciembre y el primer encuentro de enero, síntoma de las dificultades que entraña sacar los tres puntos en esta categoría. En su casa, presentan un balance de siete victorias, cinco empates y sólo una derrota (la mencionada ante el cuadro ferrolano, que demostró que el feudo gijonés no es inexpugnable).

El Real Valladolid se ha solidificado defensivamente después de la racha de tres derrotas y ha sido capaz de arañar puntos en el Martínez Valero y en Butarque, aunque ofensivamente sigue muy gripado. Como visitante sólo ha sacado 14 puntos de los 41 que tiene y es, junto a Andorra y Amorebieta, el equipo que menos goles ha conseguido (ocho) en su versión forastera. El Pucela sólo ha ganado dos partidos lejos de Zorrilla, ha empatado cuatro y ha perdido siete. Los dos últimos empates podrían albergar ciertas esperanzas si el equipo fuese capaz de encontrar soluciones efectivas en ataque para marcar los goles que tanto se le resisten. Esa es la gran obsesión que recorre el vestuario.

En El Molinón habrá que comprobar si Pezzolano ejecuta cambios en el once. A pesar del 0-0 en el último partido ante el Albacete, hubo fallos defensivos que pueden hacer pensar que César Tárrega tiene opciones de aparecer en el eje de la zaga, aunque el técnico ha mostrado su confianza en la consolidada pareja Boyomo-Torres. La irrupción de Amath Ndiaye por la banda izquierda del ataque ha dejado buenas sensaciones, aunque eso ha supuesto que Raúl Moro haya quedado como revulsivo desde el banquillo, con el fin de limitar sus arrancadas y evitar una nueva lesión muscular. Álvaro Negredo tuvo ya ocasión de debutar ante el Albacete y buscará su primer gol como blanquivioleta durante el tiempo que Pezzolano le conceda ante el Sporting. La recuperación de Marcos André, que ya ha empezado a trabajar con el grupo, añadirá pólvora al equipo de aquí al final de la competición, aunque habrá que ver en qué momento empieza a tener minutos.

El Sporting llega lastrado por las bajas, incluida la del sancionado Gaspar Campos, su máximo goleador del curso con nueve dianas. Christian Rivera, uno de los futbolistas más en forma del cuadro gijónes, recibió un fuerte golpe durante un entrenamiento y ha pasado los últimos días apoyado en muletas. Ramírez se ha encontrado con una ristra de contratiempos físicos en la plantilla durante la semana porque Cali Izquierdoz presenta una lesión en el sóleo. El portero Rubén Yáñez se ha perdido los dos últimos encuentros por problemas en la rodilla, lo que ha llevado al cubano Christian Joel a la titularidad. El exblanquivioleta Roque Mesa sí está disponible y tendrá la oportunidad de medirse por primera vez al Pucela, de donde salió el pasado verano.