El Real Valladolid se desinfla ante el AVS Futebol portugués

Pezzolano repitió el mismo once inicial que ganó al Rayo el pasado miércoles, con la única y gran novedad de Iván Fresneda, que se asomó a su primer partido de pretemporada. El lateral notó la falta de ritmo en la pretemporada del equipo y se vio en demasiadas ocasiones a expensas de Mercado, el extremo del AVS, Fresneda perdió algún balón peligroso cerca del área de Masip, pero su entrada en el equipo titular manda un mensaje claro: mientras no se cierre su traspaso, puede seguir contando para el Pucela, algo que también sucedió en la segunda parte con la aparición de Selim Amallah sobre el césped de Zorrilla.

El partido-entrenamiento pareció encarrilarse rápidamente. Iván Cédric prolongó a las primeras de cambios su idilio con el gol: si ante el Rayo se destapó con un sonoro 'hat-trick' ante los portugueses del AVS le bastaron tres minutos para inaugurar el marcador con un bello taconazo a pase de Raúl Moro.

El Real Valladololid aceleró mucho y jugó a placer durante los primeros minutos ante un rival desarbolado en todas sus líneas. Fluido en la circulación, con profundidad por las dos bandas y superando fácilmente los marcajes, el equipo de Pezzolano hizo el 2-0 en el minuto 10, cuando Tunde quebró a su defensor por la izquierda y el inevitable Cédric continuó con su particular festín realizador tras aprovechar un rebote de la defensa.

El equipo pucelano estaba tan cómodo que hasta Enzo Boyomo se animó a subir a zona atacante rival para poner un centro al área. Monchu, de nuevo proyectado arriba como mediocentro ofensivo, se internó como una exhalación por el pasillo interior antes de caer derribado en el área en un penalti cometido por el central Anthony. El propio Monchu se encargó de convertir el 3-0 desde el punto fatídico, en el primer y único gol de la pretemporada marcado por un futbolista con ficha profesional.

Aunque Pezzolano reclama intensidad constante, el 3-0 en 23 minutos acabó por desinflar al Real Valladolid, un factor que el AVS no dudó en aprovechar. Vasco demostró que posee mucha calidad en el equipo luso y empezó a martillear desde la izquierda. Masip tuvo que intervenir tras una gran acción del extremo, antes de que Nené marcase de cabeza el 3-1 tras un saque de esquina en el que César de la Hoz reclamó una falta previa no señalada por el colegiado.

Los portugueses endurecieron el amistoso con faltas muy duras que causaron una refriega sobre el césped, tras una fuerte entrada de Luis Silva sobre Raúl Moro, que fue objeto constante de los golpes rivales. Una vez calmados los ánimos, la situación perjudicó al Real Valladolid que perdió aún más el hilo del partido tras levantar el pie del acelerador. Desapareció la fluidez en el juego y se incrementó la inseguridad atrás: Víctor Rofino no pudo despejar un centro al área sin oposición que Nené se encargó de rematar en dos ocasiones para poner el 3-2 en el minuto 40. Los problemas eran crecientes.

Pezzolano cambió todo el equipo (salvo el portero Masip) tras el descanso, con la presencia de Selim Amallah en el campo, en otra declaración de intenciones, sin resolverse aún su salida al Valencia. El AVS Futebol mantuvo la estela de la primera parte y Vasco, el mejor de los visitantes, rubricó el 3-3 nada más reanudarse el partido en otra acción a balón parado mal despejada por la nueva zaga local, que pasaron a conformar en su eje los canteranos Quintana y Frimpong, todo un síntoma de la falta de efectivos en la posición de central.

Con múltiples cambios también a partir del minuto 60 del AVS, el partido perdió mucho ritmo y sólo Lucas Rosa, jugando como extremo derecho, causó varios incendios en territorio rival. Amallah apareció con destellos de calidad y Sergio León, muy oscurecido en líneas generales, tuvo su momento de más brillo en un remate de chilena a centro de Lucas Rosa que estuvo a punto de encontrar portería. La acción levantó los aplausos del público asistente. El AVS pudo llevarse el partido con nuevos remates a balón parado (el central Anthony gozó de una gran ocasión tras un córner), pero los portugueses ya no fueron capaces de batir a Aceves, que había relevado a Masip en la portería. El incisivo Lucas Rosa también probó a Moura, el guardameta del conjunto luso, en el tramo final.

El 3-3 final mostró a un Real Valladolid que perdió intensidad rápidamente tras encomendarse a los goles de un Cédric en estado de gracia. En defensa, mostró excesiva y preocupante fragilidad, un factor que debe corregir de inmediato para iniciar LaLiga de Segunda el viernes. La competición no espera.