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El Real Madrid confirmó los pronósticos y se llevó los tres puntos en un partido donde demostró oficio, paciencia y un pelín más de acierto que los del Pucela. Porque los primeros cuarenta y cinco minutos fueron un auténtico antifútbol, donde el Real Valladolid se ... movía con soltura, mientras que tras el descanso, fueron los blancos los que tomaron el mando, crearon las mejores ocasiones y maduraron el partido hasta que Nacho anotó el gol del triunfo. Un excesivo castigo para un Pucela al que la necesidad de buscar el empate le llevó incluso a arrinconar al Real Madrid en los últimos minutos y disponer de un par de ocasiones para haber evitado la derrota. Pero fue como morir en la orilla después de nadar y nadar todo el partido en mitad de la corriente. Como anécdota, el debut del canterano Miguel en los últimos minutos del partido, aunque apenas tuvo opción de tocar el balón.
Real Valladolid
Masip, Antoñito, Kiko Olivas, Ralisu, Joaquín, Raúl Carnero, Alcaraz, San Emeterio (Miguel, min. 80), Míchel, (Toni, min. 57) Enes Ünal (Plano, min 75) y Guardiola.
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Real Madrid
Courtois, Nacho, Varane, Sergio Ramos, Mendy, Kroos, Casemiro, Isco (Lucas Vázquez,min. 73), Modric (Valverde, min 87), Benzema y Rodrygo (Jovic,min. 92).
Goles: 0-1. Min. 77: Nacho, a centro de Kroos.
Árbitro: Del Burgo Bengoetxea. Amonestó a Joaquín, del Real Valladolid, y a Varane. Modric y Nacho, del Real Madrid.
Incidencias: Estadio Zorrilla con una entrada de 23.404 espectadores.
El Real Valladolid saltó al frío Zorrilla con una disposición de cuatro defensas, cuatro centrocampistas y dos delanteros con el fin de contrarrestar el potencial del centro del campo madridista y bloquear su juego, pero apenas se llevaban 11 minutos cuando Casimiro remató a gol una falta botada por Kroos. Afortunadamente, el VAR indicó al colegiado que el hombro del brasileño estaba unos centímetros por delante del último defensor blanquivioleta. Fue un susto y la única vez que el balón rondaba las áreas, porque en estos primeros diez minutos el balón iba y venía sin ningún sentido por parte de ambos conjuntos. Y en este sentido, el trabajo de los hombres de Sergio González daba sus frutos ya que no se jugaba absolutamente a nada.
Y así transcurrió prácticamente toda la primera parte, sin atisbos de fútbol, perdiendo y recuperando el balón por parte de ambos equipos sin llegar a pisar las áreas, sin crear ocasiones de peligro, sin generar más de cuatro pases seguidos y no digamos ya una jugada de mérito. Y ya puestos a ser objetivos, las únicas ocasiones en las que el balón se acercó a alguna de las porterías fueron en un córner directo que lanzó Míchel y que Courtois salvó ins extremis, y otro centro-chut muy lejano de Carnero que también Courtois se vio obligado a despejar.
Al filo de la media hora, el Pucela incluso metio en su campo al Real Madrid, eso si, sin atisbos de generar una jugada de ataque en condiciones, mientras que los de Zidane ni siquiera eran capaces de salir al contragolpe. En los minutos finales fueron los blancos, ayer de azul, quienes dominaron timidamente el balón, pero sin ninguna eficacia ni rendimiento, sin llegar siquiera a entrar en el área pucelana.
De esta forma, la primera parte resultó realmente anodina, sin nada de fútbol, con un Pucela que parecía sentirse cómodo en ese estilo y un Madrid completamente desdibujado y sin ataque.
Tras el descanso el Real Madrid, líder de la liga con el empate a cero, saltó dispuesto a cobrarse los tres puntos y aumentar su ventaja en la cabeza de la tabla. Así, comenzó a circular el balón con mejor criterio y a encerrar en su campo y casi en su área al Real Valladolid. Y las ocasiones comenzaron a llegar para los de Zidane. Rodrygo remató junto al palo y Masip se estiró para enviar a corner a los 50 minutos, y después fue Benzema el que intentó un pase solo ante el portero blanquivioleta, que atajó también el balón. El francés volvió a rematar de cabeza, pero se marchó fuera por poco. Eran muchas ocasiones ante un Real Valladolid que había perdido la fortaleza de la primera mitad y sobre todo el contacto con el balón. Los de Sergio González perseguían sombras y cada vez se hacía más de noche en el área blanquivioleta. El técnico intentó buscar más chispa en el contragolpe y retiró a Michel por Toni e incluso dio entrada a Plano por un voluntarioso Ünal, mientra que Zidane retiró a un ineficaz Isco buscando más poder por la banda con Lucas Vázquez.
Pero el partido seguía por los mismos derroteros. Presión blanca, Pucela encerrado y ocasiones con cuentagotas. Hasta que un centro de Kroos, tras un córner lo convirtió Nacho en el gol del partido a trece minutos del final. Sin lugar a dudas un premio para los blancos y quizás un castigo excesivo para un Pucela que hasta entonces se había defendido con orden.
No quedaba otra que buscar la portería de Courtois y el Pucela estuvo a punto de conseguir el empate ya que se mostró más agresivo y vertical, sobre todo a través de la banda izquierda con Toni y por ahí llegaron las ocasiones blanquivioletas con un remate de Guardiola que interceptó Mendy, un disparo de Joaquín que salió desviado por los pelos, y el gol anulado a Guardiola por unos centímetros en fuera de juego. Pero ya no tuvo tiempo para más y el Real Madrid se llevó los tres puntos de Zorrilla.
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