Borja Fernández

Caso Oikos

«El primero que rompe la presunción de inocencia conmigo es el Real Valladolid»

Habían pasado diez días desde que el gallego había colgado las botas en Zorrilla cuando llegó la detención del Caso Oikos. Rememora cómo echó de menos un posicionamiento firme del que es el club de su vida.

«A las pocas horas tenía mensaje de Ronaldo, de Jorge Santiago y de Carlos Suárez, que estaban en contacto con mi familia, pero el club de forma pública lo hace mal, muy frío. De hecho, es el propio Real Valladolid el primero que rompe la presunción de inocencia conmigo», explica al tiempo que admite que a los tres días de la detención se reunió con Ronaldo en Madrid.

«Me dijo que había que esperar para que volviese, que lo había intentado, pero que los abogados no le dejaban que entrase en el club. Que todos sabían que yo no había hecho nada, pero que no se podía hacer nada. Tuvieron que pasar ocho meses desde que ya me habían desvinculado de la investigación para que pudiese volver«, afirma.

«Es verdad que luego he estado como acompañante de representantes del club en Vitoria, en el palco del Bernabéu... Aunque a alguno no le gustaba... Pero Ronaldo quería que estuviese, hasta el punto de que el Valladolid quiere que me prepare y haga dos Máster en Madrid: uno de dirección deportiva y otro en gestión de entidad deportivas«, reconoce. «Ronaldo quería que estuviese cerca de la dirección deportiva, que hiciese de enlace entre el equipo y el club; y de representante institucional, esa figura que ya tienen otros clubes como el Real Madrid o el Espanyol», profundiza.

«En ese momento venía de ser uno de los capitanes, y los jugadores confiaban mucho en mí, y querían esa persona de enlace, una persona que hasta hace dos días había estado en el vestuario, y para mí eso sí que era un Máster... Estar cerca de Miguel Ángel Gómez, de ver cómo la dirección deportiva trabajaba...».

Posteriormente, en 2021 -los hechos de la Oikos se remontan a mayo de 2019-, el club se pone en contacto con Borja de nuevo. «Me llamá Paulo André, por petición de Ronaldo, justo antes de fichar a Fran Sánchez, y me dice que tengo que estar en el club sí o sí», describe Borja. «El equipo desciende, y yo venía de trabajar con Javi Baraja. Echo una mano en la reestructuración del filial y echo una mano a Fran Sánchez cuando llega. Luego me dicen que si puedo hacerme cargo del Juvenil A, porque Baptista coge el Promesas y hago la temporada con los juveniles», prosigue el gallego.

«Acabo el año y me dicen que están muy contentos, y que no saben si voy a seguir en el Juvenil A o en el Promesas... Parece ser que quieren que esté en el Promesas, pero Ronaldo quiere que Baptista siga en el filial y yo me quedo sin un equipo y sin el otro...», valora el gallego.

A partir de ahí, ya no hay más noticias de Ronaldo. Ni de Paulo André. Ni del Real Valladolid. El siguiente encuentro de Borja con el presidente del Real Valladolid se da el día del descenso del Pucela con el Getafe la pasada temporada. «Estaba comentando para DAZN, y parecía que sí habría una conversación pendiente, pero no. No hubo conversación. Es algo raro, pero no solo me ha pasado a mí en este club, sobre todo en los últimos años», valora el excapitán blanquivioleta, que aún así, no es capaz de cerrar la puerta al «club de mi vida».

«Me lo planteo muchas veces. No lo sé. Es algo que se tiene que poner encima de la mesa, pero no va a suceder, porque ni siquiera me han pedido perdón, ni nadie va a retroceder en el tiempo».

Borja Fernández sigue sin entender mucho el cambio de relación con el que llegara a ser compañero en el vestuario del Real Madrid en la etapa de 'los Galácticos', aunque tiene indicios de que puede estar ligado a figuras como la de David Espinar. «No tenemos ninguna relación, y el último día que estuve en el palco, se giró», apostilla.