Poner en valor el Real Valladolid

Veamos.

Más allá del presupuesto, que siendo importante no es lo más relevante que existe a la hora de decidir el potencial de un equipo de fútbol, muy pocos parecen haberse percatado de que lo ha logrado la mayor parte de la plantilla del equipo que acabó quinto en Segunda la pasada temporada; con delanteros sin experiencia en Primera; con dos centrales que nunca habían jugado en la máxima categoría; con siete jugadores de menos de 24 años y con una edad media de 27, lo que implica una adecuadísima mezcla de veteranía y empuje.

Terminados los fastos y las alegrías y comenzadas las vacaciones con parada en Ibiza –qué bien ha manejado Ronaldo las últimas semanas de competición y cómo ha sabido demostrar a los que creíamos que no era un tipo empático que estábamos equivocados–, empieza un nuevo capítulo.

Hay que confeccionar la plantilla. Y el que mejor sabe hacer tal tarea es Miguel Ángel Gómez.Que nadie lo dude. ¿Conocen ustedes a algún director deportivo que se estrene al frente de un equipo y logre en dos años lo que ha logrado el cordobés? Yo no. Pues si nadie lo ha hecho mejor que él y tiene contrato en vigor, mejor no marear la perdiz y que trabaje desde ya. Bueno, seguro que lo está haciendo ya. No he conocido tipo más entregado a su trabajo. Gómez es de esas personas que mientras los demás celebran, él labora. Y después de dos años fichando sin dinero –que ya tiene mérito– se ha ganado el derecho a ir al mercado con parné en el bolsillo.