Plano reivindica en Marbella su candidatura para regresar al once

La evolución táctica que ha sufrido el Real Valladolid en esta temporada respecto a las dos anteriores en Primera ha devenido en una cierta pérdida de protagonismo de Plano. Sigue siendo un habitual de las alineaciones iniciales, pero es sustituido, por ahora, con más frecuencia que las temporadas precedentes. En la 19-20 se fue al banco antes de tiempo en 8 ocasiones y en 3 en la temporada de su debut en Primera. Este año ya ha hecho la mitad del camino en relación a las veces que fue sustituido la pasada campaña.

El denominado salto de calidad, en este sentido, le ha perjudicado. Hay más jugadores que ocupan su posición y hay más jugadores que son, al menos, tan versátiles como él.

Con todo, y pese a que su preferencia personal es jugar en la derecha pese a ser zurdo (o quizá por eso), Sergio le alinea cada vez con más frecuencia por su banda natural o le da galones para viajar hacia el centro y convertirse en un media punta con llegada.

Eso fue, precisamente, lo que ocurrió en Marbella. Con el equipo atascado en el comienzo de la segunda parte, Plano empezó a moverse por la zona de tres cuartos. Y pronto se convirtió en el jugador que, entrando desde atrás y sorprendiendo acabó por desarmar a la zaga marbellí.

En la forma de actuar de Sergio, es raro ver de titular a un jugador que ha disputado dos horasde encuentro en el partido anterior. Bajo esa premisa el madrileno no sería titular ante el Valencia el domingo, pero visto su despliegue físico ante los de la Costa del Sol no es descartable que regrese al once en detrimento de Jota o de Hervías. O de Toni.

Previsiblmente la banda derecha de los levantinos la ocupará el portugués Thierry, un jugador con carencias defensivas evidentes, muy profundo pero que se deja ganar la espalda. Un enemigo goloso para Plano.