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El Real Valladolid dista de ser un equipo sólido. Los desajustes sobre el césped resultan evidentes en muchos momentos de los partidos y uno de los defectos de los que adolece el equipo tiene que ver con la distancia que aparece entre las líneas y que favorece las oportunidades rivales. Paulo Pezzolano, entrenador blanquivioleta, sabe que el Pucela debe recuperar una versión más granítica, como mostró en los tres primeros que jugó como local en Zorrilla, donde sumó cinco puntos y no encajó goles. Desde entonces, esa solidez ha saltado por los aires y el equipo no ha vuelto a puntuar en su feudo. La visita del Athletic Club este domingo (18:30 horas) volverá a poner a prueba la capacidad de blindaje o, al menos, el sellado de líneas para evitar la creación de espacios ante un rival con mucha capacidad para desbordar.
«Debemos buscar la solidez como equipo. Bloques más unidos para que los rivales no tengan tantas facilidades. Es lo que trabajaremos dentro del campo y también más creación y en la parte ofensiva para poder ganar», detalló Pezzolano durante su comparecencia prepartido de este viernes.
El entrenador tiene claro que uno de los grandes problemas que debe resolver pasa por mantener «las líneas más juntas en momentos del partido». «No quebrarnos por ir a presionar, por ir a buscar arriba. O, si estamos más bajos, permanecer todos más juntos, más cerrados. No dar tanta facilidad al rival y estar más fuertes dentro del área. Para mí la clave pasa por tener las líneas más juntas cuando no dispongamos del balón. Y después, sin duda, intentar crear más: ser más verticales y terminar las jugadas. Eso nos va ayudar a tener más oportunidades y a equivocarnos menos en algunos pases que estamos errando. Debemos estar más juntos como equipo y generar lo que tenemos que generar ante un rival vertical, que presiona muy bien y que es muy fuerte en los duelos. Debemos evitar todo eso y tratar de tener protagonismo nosotros», abundó Pezzolano en su comparecencia ante los medios de comunicación.
La amenaza del Athletic Club pasa en gran parte por los hermanos Iñaki y Nico Williams, auténticos puñales por las bandas, aunque también con capacidad para aparecer entre las líneas que quiere sellar el entrenador del Real Valladolid. Por eso, cuando se le pregunta cómo contrarrestar la capacidad ofensiva de los rojiblancos, Pezzolano apunta a la reducción de espacios para evitar que el Athletic haga lo que más le gusta: correr. «Los laterales pasan por la derecha y por la izquierda. Es un equipo que te hará daño si le concedes espacio. En algún momento te van a llevar abajo, pero no es lo ideal estar todo el rato ahí. Así que hay que saber manejar esos tiempos. Sin duda, hay que sacarlos de esos espacios que explotan muy bien por su velocidad, verticalidad y por sus duelos ofensivos. Debemos trabajar defensivamente las ayudas para evitar esa fortaleza que tienen».
Paulo Pezzolano no sólo trabaja la parte técnico-táctica sino también el factor psicológico en un Real Valladolid instalado en zona de descenso que debe aprender a gestionar las derrotas. «Siempre trabajamos eso. Somos un equipo que va a perder más que a ganar. Lo sabemos desde el principio. Cuando se dan derrotas seguidas, afecta un poco… como afecta a todos los que estamos ahí abajo. Porque somos seis equipos los que estamos juntos, a uno o dos puntos. El año va a ser así. Ojalá no lo fuera y estuviéramos viendo otra cosa. Es vital saberlo vivir internamente, saberlo vivir en cada partido, en cada momento de los encuentros. Trabajamos mucho en eso. Cómo podemos ayudar dentro de lo táctico para que seamos más fuertes dentro de la cancha. Esperamos lograr una victoria este fin de semana para revertir la situación».
El entrenador blanquivioleta no descarta repetir el mismo once inicial de los últimos partidos, ya que considera que «da confianza» a los futbolistas que aparecen en la titularidad, aunque recordó que hay otros jugadores «que están esperando su oportunidad» y trabajan «muy bien». «Hay que ver si este es el momento o no o cuándo hacer las cosas, pero sin duda podría comenzar el mismo equipo tranquilamente… o hacer algún pequeño cambio».
El Real Valladolid vivirá el domingo ante el Athletic un ambiente muy crítico en las gradas contra la gestión de la entidad, con pañolada en el minuto 12 y cánticos constantes de la directiva, según ha anunciado el Fondo Norte 1928. Pezzolano entiende que «la afición es pasión y quiere ganar». «Lo que hagan va dentro de la pasión. Ellos entienden que es lo mejor, pero yo les puede decir de la parte de adentro que no es lo mejor para este grupo de jugadores jóvenes. Para ellos sería mejor el apoyo al equipo. La afición quiere ganar, igual que nosotros. Nosotros debemos cambiar las cosas con juego y resultados. Ese es nuestro objetivo para próximos partidos y ojalá se dé así».
Pezzolano fue preguntado expresamente por el papel de Karl Hein, el portero más goleado de Primera División en las doce primeras jornadas, pero también uno de los jugadores más destacados del Real Valladolid de manera regular por sus paradas. Para el entrenador, se trata de un «gran» guardameta que está «haciendo las cosas bien». «Nosotros debemos mejorar como equipo lo defensivo. Si sacamos un partido que aumentó nuestro volumen de goles en contra [el 7-0 ante el Barça] estaríamos por debajo de algunos y parecidos a tres o cuatro equipos en goles en contra. Pero sí, a día de hoy, somos el peor sin duda».
Pezzolano tiene a «casi todos» los jugadores «a la orden» después de que la enfermería se haya ido vaciando en las últimas semanas. El entrenador confía en contar con Juanmi Latasa tras superar los problemas en el tobillo derecho que le obligaron a retirarse en la primera parte del choque de Copa tras marcar dos goles ante el Astur y quedarse fuera de la última citación frente a Osasuna. Cenk Özkacar y César de la Hoz también están disponibles y el primero podría aparecer como central titular en el eje de la zaga. «Podría entrar como titular, sí. Si no lo hiciera, se debería a un tema técnico-táctico, pero ya ha entrenado con el grupo toda la semana, al igual que De la Hoz. Están todos a la orden y esperaremos a Latasa hasta mañana para ver si está, pero creo que también va a llegar».
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