Pellegrini, el técnico al que no se le da bien el Real Valladolid

'El ingeniero' es una persona cabal. Tan cabal que decidió que su paso por el fútbol profesional dentro del terreno de juego acababa el día en el que un chaval de 17 años le superó en un salto. Que él tuviera 35 y que el crío que le ganó el duelo se llamara Iván Zamorano no influyó para que comprendiera que el nivel de autoexigencia que se aplica era ya insuficiente para competir en la liga chilena y en un equipo del prestigio del Universidad de Chile. Y se embutió en el traje de entrenador, con el que ha recorrido medio mundo con dispar suerte, pero siempre dejando impronta de técnico correcto, sencillo, nada complaciente, crítico cuando hay que serlo y, sobre todo, respetuoso hasta el extremo con rivales y árbitros.

Ni siquiera elevó la voz cuando a primeros de enero de 2017 el Real Valladolid de Mendilibar eliminaba de la Copa a su Villarreal. No es, en cualquir caso, el Pucela su rival preferido. En Zorrilla solo ganó, 1-2, con el Real Madrid. En todas las demás ocasiones que ha visitado la orilla del Pisuerga se ha ido con derrota o empate.

Hombre tranquilo y reposado, el exjugador argentino del Zaragoza D'Alessandro presume de ser el único que le ha hecho perder los nervios. Fue en un clásico River-Boca. El chileno dirgía a los 'millonarios' y en un momento dado observó perplejo como D'Alessandro simulaba un penalti pese a tener amarilla. Del enfado quiso sustituirle en el descanso, pero Coudet, actual técnico del Celta, le hizo recapacitar. Años después se reencontrarían técnico y jugador en un Zaragoza-Villarreal y el entrenador le reconoció al futbolista que su pelo blanco era en gran parte consecuencia de los disgustos que le dio.