sergio sanz
Lunes, 10 de agosto 2015, 09:57
Cada vez falta menos para el estreno del Real Valladolid en Liga y, de momento, ha conseguido el aprobado en pretemporada. El conjunto dirigido por Gaizka Garitano ha disputado cinco amistosos en las cuatro semanas que lleva de preparación. Hoy entra en la última, en ... la que jugará otros tres partidos antes de afrontar la del 17 de agosto para arrancar la temporada el sábado 22 en Córdoba.
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De los cinco enfrentamientos que ha tenido hasta ahora, solo dos han sido contra equipos de mayor categoría. El primero de ellos, frente al Athletic Club, supuso el estreno de la era Garitano. Con 13 jugadores del primer equipo y nueve del filial, el Pucela sacó un empate en Sestao ante un rival más rodado y que afrontó el amistoso como un test serio, ya que a la semana siguiente tenía que disputar la ida de la previa de la Liga Europa. La solidez defensiva comandada por Diego Mariño y Kepa permitió que el Real Valladolid empatase el encuentro, después de que Guzmán, quien desde el primer día dejó muestras de calidad con el balón en los pies para ver portería, marcarse un golazo.
El Celta B y el Pontevedra fueron los siguientes en la concentración en el Balneario de Mondariz. A Lagoa vivió el primer triunfo del Real Valladolid 2015-2016, ante el filial celeste. Caye, Guzmán y Alfaro hicieron los goles, mientras que Kepa Arrizabalaga mantuvo su meta a cero.
Pasarón sirvió para confirmar la solidez blanquivioleta. El conjunto de Garitano, con varios rapados del filial por las novatadas, doblegó al Pontevedra con dos tantos en el último tramo del encuentro. Juanpe, primero, y Guzmán, después, anotaron para firmar la segunda victoria. Además, el extremeño se destapó definitivamente como goleador al marcar en cada encuentro.
Portugal y Zamora
Después de la semana en Galicia, el Pucela llegó al ecuador de la pretemporada. Empezaba una fase más seria para los blanquivioletas. La intensidad continuó en cada sesión, como el primer día, y poco a poco Garitano marcó el estilo de juego por el que quiere caracterizar a su equipo.
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Contra el Rio Ave quedó empañado el trabajo defensivo, debido a un fallo en el marcaje de Marcelo Silva al jugador que hizo el tanto de cabeza. Pese al poderío en el juego aéreo que pretender imponer el técnico, el equipo también encajó en Zamora un gol con la testa.
Pero los resultados no fueron negativos en ninguno de los dos casos, gracias al empuje en ataque. Aunque es cierto que la mayor goleada se ha producido en el último amistoso, el equipo ha mejorado poco a poco en el apartado ofensivo para crear cada vez más ocasiones. El portero del conjunto portugués evitó la victoria blanquivioleta con sus paradas, en casi todas las acometidas que generaba el Pucela.
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En el Ruta de la Plata, de repente, en el segundo tiempo, la puntería se afinó. Parecía que al equipo le iba a suceder lo mismo que ante el Rio Ave, pero nada más volver del descanso abrió la lata y los goles cayeron uno tras otro hasta llegar a seis.
Mejoría con los refuerzos
El Real Valladolid arrancó la pretemporada con lo justo para afrontar un partido de la Liga Adelante. Incluso le habría faltado un jugador para poder hacer los tres cambios. El filial ha sido un gran apoyo durante las primeras semanas, pero, a medida que han llegado los refuerzos, Garitano ha descartado a varios futbolistas. Óscar Arroyo, Ángel, Caye Quintana, Zambrano, Julio, Deve, Dani Vega, Mayoral, Toni, Anuar, Manel Royo, Cristian, Iván Casado y Dani Hernández han subido con el primer equipo, aunque algunos solo para completar entrenamiento. Solo los cuatro primeros se han mantenido con regularidad y, de momento, parece que podrían entrar en los planes del entrenador -a falta de algún fichaje-.
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Aunque los del Promesas han mostrado un buen nivel, cuando han llegado las incorporaciones para la primera plantilla, como es lógico, han regresado al filial. El caso más claro es el del eje de la defensa. Con las llegadas de Juanpe y Marcelo Silva, Garitano ya cuenta con tres centrales, que, pese a fallos puntuales, han mostrado más solidez atrás. El objetivo durante la temporada es que no haya errores para mantener la portería blanquivioleta a cero el mayor número de veces posible. De hecho, el Real Valladolid ha encajado en tres ocasiones, y solo un gol, en cada uno de esos encuentros.
Pero no solo los números son favorables en defensa, sino también en ataque. La goleada en el último encuentro ha hecho llegar a los 13 tantos en cinco partidos -seis de ellos llegaron en el último-. Guzmán y Alfaro encabezan la lista de máximos anotadores, con tres dianas cada uno. Rodri, en su estreno como blanquivioleta, hizo un doblete en siete minutos en el Ruta de la Plata. La máquina ofensiva comienza a carburar.
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Semana definitiva
Pese a entrar en la última semana de pretemporada, Garitano deberá preparar casi los mismos partidos que en el mes anterior. Cierto es que en el triangular del miércoles será de 45 minutos frente a la Cultural Leonesa y otros tantos contra el Sporting de Gijón, pero, en teoría, esos dos rivales no jugarán de la misma manera ni plantearán el choque igual.
No hay duda de que serán mitades disputadas, en las que el Pucela tendrá que dar el máximo para salir victorioso. También habrá que ver si el técnico vizcaíno opta por afrontar las partes como si fuera un partido normal o si, por el contrario, sacará dos onces diferentes.
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El plato fuerte llegará el sábado en Zorrilla, cuando reciba a la SD Eibar en el XLII Trofeo Ciudad de Valladolid. Será un partido especial para el exarmero Garitano.
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