Masip se lleva la mejor nota del Real Valladolid en el desastre ante el Andorra

El portero del Real Valladolid evitó con algunas paradas de mérito que el Andorra marcase desde el inicio del partido y en el minuto 3 ya sacó un guante ante Karrikaburu. Igualmente, evitó el tanto de Pombo tras el descanso. Estuvo atento para corregir algunos errores de la defensa, aunque acabó encajando dos goles en los que poco pudo hacer.

Tuvo trabajo defensivo por su banda y se animó también con el paso de los minutos a subir hasta zona atacante del Andorra para colocar centros, aunque sin éxito. Estuvo acertado en los duelos a ras de hierba de los que salió airoso. Recibió una dura patada de Karrikaburu en la segunda parte

El defensa central tuvo mucho trabajo ante los continuos ataques del Andorra y guardó bien la posición en la mayoría de las acciones. Eso sí, perdió la marca de Scheidler en el gol que acabó costando la derrota al intentar cortar el pase interior de Jandro Orellana.

Habría sido el mejor si el equipo no hubiera hincado la rodilla en el tramo final. Marcó el gol que dio la ventaja al equipo y estuvo inconmensurable durante muchos minutos, pero erró en el marcaje de Pastor en la acción del 1-1. Tuvo la opción de empatar en el tiempo añadido, pero falló.

Desde los primeros minutos se vio que el Andorra encontraba vías de ataque por su banda. donde sufrió demasiado las internadas rivales. Tampoco tuvo protagonismo en ataque y no llegó a completar ningún centro desde su zona. Sólo apareció con cuentagotas.

Volvió al once en detrimento de Stanko Juric con una actuación muy pobre. No acabó de sostener defensivamente al equipo en la medular y apenas tocó 23 balones. Además, vio una amarilla que le llevó a ser sustituido por Juric y que le hará perderse el próximo partido por acumulación.

Estuvo muy vigilado por los defensores del Andorra y logró filtrar algunos pases entre líneas. Intentó marcar un gol olímpico que obligó a la estirada de Ratti. En su suspenso pesa mucho la acción que originó el segundo gol del Andorra, cuando perdió el balón al intentar darse la vuelta con él.

No fue el puñal de los partidos precedenes, pero al menos logró asistir a Boyomo con un certero pase de cabeza que puso al equipo por delante en el marcador. Se le ve físicamente más justo que tras su llegada en enero y acabó dejando su sitio a Biuk en el minuto 57.

No acaba de marcar diferencias jugando como mediapunta entre líneas, una posición que no es la suya. Tocó balones que no fructificaron y ejecutó un par de lanzamientos, incluido un taconazo en el que no conectó bien con el balón. Fue el último cambio para dar entrada a Marcos André.

Volvió al once de Pezzolano para jugar en la banda izquierda del ataque y ayudar a Lucas Rosa atrás, pero tuvo un papel muy residual y estuvo invisibilizado durante la primera parte. En el descanso, Pezzolano le cambió para que Robert Kenedy ocupase su demarcación.

Pasan los partidos, las titularidades y los minutos sobre el césped y sigue sin marcar. Dispuso de una buena ocasión en el minuto 10 al rematar de cabeza una falta botada por Monchu. Sin embargo, no encontró portería. Sólo tocó 19 balones y acabó siendo sustituido por Iván Sánchez.

El entrenador:

Alteró un once que funcionaba con cambios que no dieron resultado. Dejó que el Andorra creciese durante el partido y no fue capaz de sostener tácticamente al equipo. Pecó de conformista y lo pagó.

También jugaron:

Intentó percutir en ataque. Recuperó bien, pero no marcó diferencias y perdió algún pase peligroso.

Este vez le tocó salir desde el banquillo y tuvo cierto protagonismo.

No cogió el ritmo y se mostró fuera de foco.

Creó una gran oportunidad para marcar, pero falló en el remate.

Sólo tocó un par de balones en el tramo final.

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