El Príncipe Valiente

Noticia relacionada

Ver 19 fotos

La crónica

El Real Valladolid saca un empate áspero, pero solo depende de sí mismo para subir

Arturo Posada

Dejamos ahí a uno de los jugadores más 'valientes' de la plantilla del Real Valladolid para trasladarnos a la grada de Zorrilla, donde los goterones de sangre de la nariz del centrocampista contrastaban con la imagen de la tele en el descanso, enfocando a una niña con una galleta de esas «de Príncipe» –muy de la merienda–, contenta con 'su Valiant' en el envoltorio, ofreciéndole una suculenta galletita de chocolate. El caballero andante del cómic –con serie de televisión incluida– buscaba ese paralelismo rápido con el 'héroe' blanquivioleta, capaz de estar casi media hora con una hemorragia nasal luchando contra los monstruos de los pantanos, en esta ocasión vestidos de blanquiazul, buscando emerger en pro del ascenso.

Sin embargo, el Príncipe, ensangrentado o sublimado en el revestimiento del dulce paquete de la joven aficionada, no pasó de ahí, y 'Valiant' –o Valiente, en castellano; y Valent, en catalán, por lo de hacer un guiño a los espanyolistas, que una vez más aludieron ayer a lo de una 'Liga peligrosamente preparada para el Real Valladolid y para Ronaldo' [...]– se quedó en eso. Porque ojo con la valentía, que tal y cómo está la Segunda, quizá mejor evitar los sonrientes dientes del Príncipe, y coger el envoltorio por la parte de dentro, que aunque sea de cero en cero también puede valer.