Suspenso rotundo

El segundo gol mallorquín generó dudas por la posible interferencia de Galarreta, el cual estaba en posición de fuera de juego cuando disparo Morlanes, al estar fuera del área pequeña el equipo arbitral interpretó que no afectaba claramente al portero pucelano.

En el arranque de la jugada que acabó en gol de Monchu. Amallah sufrió en el medio campo una obstrucción de Ángel Pérez después de soltar el balónEl marroquí agarró al delantero para quitársele de encima. Aunque era motivo de revisión con buen criterio concedieron el tanto.

La jugada que dio origen al penalti fue un cúmulo de errores. Primero en la señalización de la falta. Posteriormente, una vez el balón salió por la línea de fondo. Muñiz se inventó un juego peligroso sobre Joaquín que se tiró en plancha a disputar el balón. Para después no ver la clara mano de Larin que cortaba un pase a un contrario. Fue requerido al monitor para deshacer el entuerto.

Gestionó muy mal el añadido que además fue escaso (cinco). Solo la acción de revisión del penalti se había consumido ese tiempo. El cuarto no mostró el cartel cuando se cumplió el minuto 90. Con todo ello generó cabreo cuando pitó el final

Muñiz creó cierta confusión a la hora de mostrar alguna cartulina, especialmente la que mostró a Lucas Rosa, dando la sensación de que se la enseñaba a Javi Sánchez.