Antecedentes, errores y regalos en el Real Valladolid

Una tercera consideración, íntimamente relacionada con la primera, es la comprobación de que los cambios mejoran sensiblemente lo que había; algo que nos lleva a la deducción de que no ser de la partida es un error táctico muy grave.

Ese regalar continuamente un tiempo en todos y cada uno de los partidos, muy probablemente viene relacionado con una alineación de inicio errónea, que luego al corregirse confirma la tesis.

La de la tremenda flojedad defensiva atiende a una doble motivación: de un lado lo perdido por regalo infame de la secretaria técnica, y de otro porque los mimbres existentes no alcanzan, pendientes del acople táctico que otorgan el trabajo diario y la continuidad en el juego, el mínimo exigido.

La realidad es tozuda y tiene una lógica indiscutible que nos dice que de los cinco centrales actuales, el más firme baluarte es Juma Bah, justo el último que ha llegado y el más joven de todos.

Que Javi Sánchez no está, y no sabemos ni para cuando se le espera con seguridad, ni si realmente soportará el paso continuado de las jornadas, al igual que Cenk, es obvio; tanto como que el último cartucho a utilizar es el de tomar la decisión de David Torres o Cömert.

Si como vimos ante el Rayo se prefiere al exvalencianista como cabecero en lugar de Juric, pues la cosa está clara. Este domingo, el equipo rayista nos dejó patente que la deriva en la cual está inmerso el RealValladolid es muy preocupante por lo anteriormente expuesto.

Y va a ser imposible de resolver si el cuadro técnico no acude a paliar la deficiencia defensiva tomando decisiones coherentes con lo que hay, al tiempo que potenciando el medio campo y el ataque.

Como no hay más cera que la que arde, cumple escoger al compañero de Juma y aguantarle hasta mejor tesitura, léase recuperación efectiva y real de alguno, sin cambiarle.

El equipo tiene que jugar mejor porque puede hacerlo; y lo debe conseguir colocando a gente que genere creación y haga jugar al equipo.

Si todos sabemos que Amallah es nuestro mayor valor en esa parcela hay que dotarle de otros dos jugadores que doten al juego en su doble vertiente de manejo de pelota con intención de juego, mientras otro volante de jerarquía defensiva tapa su espalda y lo inicia juego en corto y bien apoyado.

Ese '8' que escolte a Juric, mientras controla el tiempo de juego y engancha con Amallah, desde mi óptica particular es Iván Sánchez; un chico al que hay que darle tantos galones como obligaciones en el juego.

Pezzolano tiene que ser práctico para que el equipo subsista. Algo que pasa por alinear de salida a los que mejor juegan mientras les motivas, ilusionas y convences. No hay otra.