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Tres semanas ha tardado en agitarse pero basta que un club haya movido ficha para que el mercado invernal haya entrado en plena ebullición. Y el segundo movimiento anunciado ayer por el Espanyol en su carrera por escapar de los puestos de descenso puede provocar ... un efecto dominó que se lleve por delante a uno de los mejores jugadores del Real Valladolid en la presente temporada, el central ghanés Mohamed Salisu.
El origen hay que encontrarlo en el anuncio en la mañana de ayer del club que preside el chino Chen Yasheng, que ya desembolsó 20 millones de euros por hacerse con los servicios de Raúl de Tomás, de pagar la cláusula del uruguayo Leandro Cabrera, central del Getafe. Una operación que dejará 9 millones en las arcas del club azulón (pagó en su día 600.000 euros por Cabrera al Crotone italiano), pero que debilitará el centro de su zaga –solo cuenta con Etxeita y Bruno en esa posición–, escenario que obliga al equipo de Bordalás a mover ficha. Y en esa búsqueda el nombre de Salisu figura como prioridad en su agenda, en una operación por la que debería abonar los 12 millones que figuran en su cláusula de rescisión.
A última hora de ayer en el club no tenían constancia alguna del interés del Getafe ni se había recibido comunicación ni llamada al respecto para trasladar un interés por el central ghanés. En la emisora oficial del Getafe, no obstante, se hacían eco del interés por fichar a Salisu e incluso se llegaba a asegurar que el Valladolid ya conocía las intenciones del club azulón.
La respuesta en caso de que haya una comunicación en los próximos días pasa por el importe íntegro de la cláusula. La situación, en cambio, sí ha generado un clima de intranquilidad en el cuerpo técnico y en el entorno del primer equipo por la posibilidad de perder a uno de los valores más seguros esta temporada.
La operación no es tan sencilla como pudiera parecer ya que al margen de depositar la cláusula, el Getafe debería alcanzar un acuerdo con el jugador. Precisamente Salisu ha reiterado en numerosas ocasiones su compromiso con el Real Valladolid, club que le dio la oportunidad de recalar en España y poder crecer como futbolista en la mejor liga del mundo, y su intención según personas muy cercanas es la de recalar en un grande el próximo mes de junio cuando termine la temporada.
El último contrato que firmó Salisu (Ghana, 1999) le vincula al Real Valladolid hasta 2023. Se da la casualidad de que el debut del central ghanés con la camiseta blanquivioleta tuvo lugar la pasada temporada en Getafe, concretamente en enero de 2019, con motivo del partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey. En aquel encuentro se las vio con delanteros como Molina, Ángel o el propio Sergi Guardiola. Su progresión desde entonces ha resultado espectacular, apoyado en la confianza que le otorgó Sergio González al comienzo de la presente temporada convirtiéndole en el sustituto natural de Fernando Calero dándole la titularidad en campos como el del Villamarín y el Santiago Bernabéu.
En caso de que la operación se concrete, en el club ya piensan en un plan B para abordar la incorporción de otro central e incluso algún fichaje más con el importe de la cláusula (12 millones más IVA).
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