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Suenan tambores de guerra en Getafe, en una plaza donde hasta hace bien poco parecían inmunizados contra el descenso, protegidos como estaban con la vacuna Bordalás, y donde desde hace ya varias semanas se viene larvando una crisis interna difícil de sostener. El divorcio entre ... el técnico alicantino y Ángel Torres, presidente de la entidad azulona, se ha trasladado ya a la grada, donde se han escuchado ya las primeras críticas y gritos hacia la gestión del club. Un hecho insólito si echamos la vista atrás.
Una sola victoria en trece jornadas, con el peor registro anotador de la categoría (8 goles), han puesto en pie de guerra el Coliseum, donde en la última jornada (0-1 ante el Girona) se pidieron cabezas.
Buena parte de culpa lo tiene un cambio drástico en la fisionomía del plantel que gestiona Bordalás. La necesidad de equilibrar el límite salarial obligó a una estrategia de ventas radical que ha derivado en un proyecto a la deriva con muchas más dudas que certezas. El mejor botón quedó reflejado en el estreno de liga en San Mamés, donde el Getafe se presentó con 15 futbolistas.
En verano se ingresaron 30,5 millones de euros y se gastaron 9,2, con bajas tan sensibles y pesos tan pesados en el vestuario como Maksimovic, Greenwood, Óscar Rodríguez, el exReal Valladolid Enes Ünal o el popio Juanmi Latasa, entre otros.
Las llegadas (9 jugadores, tres de ellos cedidos) no terminan de cuajar, en un bloque que fundamentalmente tiene serios problemas para crear juego y marcar. La baja por lesión de Borja Mayoral, además, ha agravado sus problemas ofensivos y el cabreo del técnico por la ausencia de refuerzos de nivel. El divorcio técnico-presidente se ganó un nuevo capítulo hace unas fechas con las declaraciones del primero y la respuesta del máximo responsable del club. «Está claro que el equipo necesita 6 fichajes de primer nivel para intentar ayudar», incidió Bordalás, en unas manifestaciones que rápidamente tuvieron réplica por parte de Ángel Torres. «No habrá fichajes. Traeremos lo que podamos, pero no es un problema de fichajes, hay que confiar en lo que tenemos. Contra el vicio de pedir está el de no dar».
A poco más de un mes de que se abra la ventana de fichajes de invierno, el Getafe se topará con el mismo problema que tiene el Real Valladolid. Debe aligerar masa salarial si quiere tener liquidez para afrontar cualquier tipo de operación. Bordalás, como Pezzolano, ya ha hecho la lista de la compra. Harina de otro costal será que haya dinero en caja para satisfacerla.
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