Los 16 entrenadores extranjeros del Real Valladolid

Estuvo a orillas del Pisuerga 7 temporadas en tres épocas diferentes. Su mejor logro fue ascender una vez a Segunda y jugar la promoción para ascender a Primera. En realidad dirigió más partidos que nadie al conjunto blanquivioleta porque en aquella época se disputaban los campeonatos regionales y mancomunados que desaparecieron después de la Guerra Civil, y en este repaso solo contabilizamos Liga, Copa y competiciones europeas.

El segundo extranjero en pisar el césped del campo de la Sociedad Taurina fue otro húngaro, Carlos Platko, que era el hermano menor de Esteban y se le fichó porque éste estaba comprometido. Estuvo una temporada, la 1939-40, que pasó con más pena que gloria e incluso le pusieron un preparador físico, Manuel Marcos Ordax, porque el equipo iba de mal en peor.

El tercer técnico magiar fue Janos Kalmar, un hombre con mucho prestigio en su país que aquí no pudo cumplir el objetivo del ascenso. En la temporada 1964-65 se clasificó tercero, a dos puntos de la promoción.

El colectivo de argentinos aportó 4 técnicos, incluyendo en este grupo a Vicente Cantatore porque, aunque nacionalizado chileno, nació y comenzó a jugar al fútbol en Rosario. Mucho antes que él recaló por estos lares el que sin duda ha sido el entrenador más famoso de la historia blanquivioleta: Helenio Herrera, que debutó en el fútbol español sin obtener los resultados esperados. Se salvó en la última jornada de bajar a segunda.

Felipe Mesones estuvo al frente del equipo dos temporadas en Primera y una en Segunda, que fue la mejor porque logró el ascenso a la máxima categoría mientras que en las otras dos fue destituido.

Sin duda, el de más brillante trayectoria humana y profesional como técnico blanquivioleta ha sido Vicente Cantatore. Estuvo siete temporadas, todas ellas en Primera, siendo el entrenador con más partidos, 199, y con más victorias, 80, llevando al equipo a la final de la Copa del Rey en 1989 y clasificándole para la Recopa de Europa. Además promocionó a un buen número de chavales de la cantera, muchos de los cuales llegaron a internacionales.

El cuarto argentino, Pancho Ferraro ,empezó la temporada 2000-01 pero no pudo terminarla pues a falta de diez jornadas fue sustituido por Pepe Moré.

Del otro lado del charco vinieron tres uruguayos, el primero de los cuales, Héctor Núñez, estuvo en la temporada 1975-76 y rozó el ascenso, pero el cuarto puesto supo más a decepción que a otra cosa. El segundo charrúa fue Víctor Espárrago, cuyo fichaje despertó muchas expectativas que no pudieron confirmarse pues fue cesado en la jornada 13 de la campaña 1982-83.

El tercer técnico charrúa es el actual, Paulo Pezzolano, que llegó en un momento crítico con el Valladolid en plena crisis de resultados de los que Pacheta pagó el pato. Su sustituto despejó las dudas sobre su fichaje de forma contundente. En tres partidos ha sumado dos victorias y un empate y sobre todo ha dado un giro radical en las sensaciones ofrecidas por el equipo.

Un buen recuerdo dejó hace ya sesenta años Heriberto Herrera, paraguayo nacionalizado español, que fue fichado en abril de 1962 para afrontar la promoción de ascenso a Primera contra el Español. Perdió en Sarriá por 1-0, pero remontó en Zorrilla con goles de García y Rodilla, logrando el ascenso y rechazando continuar porque paradójicamente se había comprometido con… el Español.

El único alemán que ocupó el banquillo blanquivioleta fue Rudi Guttendorf, un trotamundos que llegó en plena temporada para salvar al equipo, que no había comenzado bien. Logró el objetivo pero aquí se le recuerda más por su populismo y peregrinas decisiones que por trabajo técnico.

Fichaje de relumbrón para la temporada 1990-91 fue el del colombiano Pacho Maturana, que había hecho un gran Mundial en Italia'90. Fichó él con tres de sus más famosos jugadores: René Higuita, Leonel Álvarez y el 'Pibe' Valderrama, que ofrecieron mucho tipismo y pocos resultados. Antes de terminar su segunda temporada, y dada la situación económica del club, acabaron despedidos.

El último grupo de extranjeros lo integran dos croatas y un serbio. Josip Skoblar llegó a finales de julio de 1998 y fue cesado a finales de octubre, con solo tres meses y nueve partidos en su haber. El otro croata, Sergio Kresic estuvo dos campañas, una en Primera y otra en Segunda con un buen balance de 118 partidos entre Liga, Copa y Copa de la UEFA.

Finalmente, el serbio Miroslav Djukic se comprometió para liderar un proyecto a tres temporadas y ya en la primera, 2010-11, logró el ascenso a primera ganando el 'play-off', y cumpliendo sin apuros el objetivo de la permanencia en la siguiente. No obstante, discrepancias con el presidente por su deseo de abandonar el club y fichar por el Valencia, su buen trabajo quedó emborronado y terminó en los juzgados.