Del blanco al blanquivioleta y viceversa

Aveces, en reuniones con amigos vinculados al fútbol sale a relucir el tema de las canteras y la atención que el Valladolid dedicó en un tiempo pasado a cuidar la suya. Aquellos años de los Gail, Eusebio, Minguela, Jorge, Juan Carlos, Torrecilla, Sánchez Valles, Borja, Fonseca, Javier Díez…, cuando Paquito iba más allá de la norma y alineaba a más sub-20 de los impuestos por la Federación.

Sin embargo, y aun reconociendo la extraordinaria importancia de aquella generación de futbolistas que crecieron desde juveniles al primer equipo, nada comparable con el dato del número de jugadores que han llegado al Real Valladolid procedentes del Real Madrid, aunque algunos también hicieron el viaje en sentido contrario. Repasando la historia hemos encontrado que más de 60 han vestido en su carrera profesional de blanco y de blanquivioleta, figurando entre paréntesis el número de partidos oficiales que jugaron con ambos equipos.

Por orden de aparición, comencemos por Evaristo San Miguel (12 con el Real Madrid, 50 con el Real Valladolid), un amateur que fichó por el Madrid para terminar sus estudios de Oftalmología. Fernando Sañudo (48, 75), un delantero excepcional que fue máximo goleador en ambos equipos. Pablo López (1, 119), médico de profesión, fue mucho más importante en la historia blanquivioleta que en la merengue.

Villanueva (7, 56) hizo el viaje en sentido inverso, aportando en Valladolid la experiencia acumulada en el Madrid. Emilín Sánchez (20, 40) extremo rapidísimo, que jugó en el Pucela antes de la guerra y en el Real Madrid después. Chus Alonso (121, 40) cubano de nacimiento, fue una de las figuras históricas del conjunto madrileño con el que fue internacional. En Valladolid estuvo cedido una temporada.

Tamayo (3, 30) lateral derecho muy fuerte que rindió más en el campo de la Sociedad Taurina que en Chamartín. Villita (9, 6) centrocampista de calidad, que jugó en Valladolid antes de la guerra y en Madrid después. Villar (9, 6) pasó sin pena ni gloria la temporada en que estuvo cedido.

Tellado (2, 15) un medio muy trabajador que jugó aquí en la temporada 1941-42. Espinosa (13, 7) un buen portero al que Ispizua cerró el camino las tres temporadas que estuvo en Valladolid. Barinaga (182, 33) otra de las grandes figuras madridistas que dejó constancia de su enorme clase las dos medias temporadas que estuvo decidido.

Maciá (1, 1) presencia meramente testimonial en ambos equipos. Leoncito (150, 51) magnífico jugador que llegó al Valladolid ya veterano, aunque rindió a gran nivel. Joseíto (179, 22) Jugó en el Valladolid siendo muy joven, para ser internacional y figura en el Madrid de las primeras Copas de Europa.

Juanco (1, 49) extremo derecho que fue más importante en el Valladolid que en el Madrid. Rafa (48, 38) una grave lesión precipitó su retirada como futbolista, destacando después como entrenador. Hilario (1, 7) portero discreto que solo estuvo un año en el Real Valladolid.

Lesmes II (221, 130) lateral izquierdo de enorme calidad, titular indiscutible en el Madrid de las 5 Copas, igual que en el Valladolid en sus dos etapas. Internacional con España. Mariscal (22, 23) delantero reconvertido en central, que aquí estuvo a la sombra de Lesmes I. Navarro II (5, 10) hermano del famoso 'fifo', no pasó de discreto en su rendimiento en ambos clubs.

Pereda (6, 31) una gran figura que rindió muy bien en el año que estuvo cedido aquí y que el Madrid cometió el error de dejarle escapar al Barcelona, donde fue internacional y capitán. Morollón (1, 200) un goleador extraordinario en el Pucela, donde fue internacional, y una figura decorativa en Chamartín. Sanchís (213, 98) centrocampista reconvertido en lateral que rindió al máximo nivel en ambos equipos, siendo internacional.

Miche (56, 33) defensa que fichó por el Valladolid algo veterano. Echarri (4, 19) centrocampista de buena calidad técnico, que rindió mucha más en el Castellón. Juanito (3, 23) delantero rápido y hábil que solo estuvo aquí un año. Vidal (91, 5) un internacional que llegó a Zorrilla en el tramo final de su carrera.

Robles (1, 14) extremo discreto que apenas dejó recuerdo. Heredia (6, 29) lateral izquierdo con muy buenas condiciones que jugó en el Valladolid en tercera división. Rincón (1, 19) otro gran jugador internacional en el que el Madrid no creyó, aunque aquí rindió a alto nivel.

García Navajas (58, 109) Sus números hablan por sí solos de su rendimiento. Francis (5, 27) otro de los muchos centrales de ambos equipos. Ito (52, 9) mucho mejor en Chamartín que en Zorrilla.

Fernando Hierro (601, 66) Una de las grandes estrellas del fútbol español, inolvidable como blanquivioleta y como blanco. Portugal (31, 3) por Valladolid pasó sin pena ni gloria. Bernardo (1, 7) no dejó huella en ningún equipo. César Sánchez (60, 236) porterazo que también fue internacional, aunque en el Madrid tuvo la mala suerte de encontrarse con Casillas.

Santi Aragón (27, 18) jugador con más calidad que rendimiento. Amavisca (146, 90) el laredano fue un extremo de enorme talento en sus clubes y en la selección nacional. Iván Campo (95 con el Real Madrid, 24 con el Real Valladolid) En el Valladolid hizo meritos para después ser importante en la zaga del Madrid.

Marcos (7, 471) en el Madrid jugó muy jovencito y en el Valladolid se convirtió en una figura histórica. Julio César (33, 104) excelente jugador el brasileño, un trotamundos del fútbol. Pablo García (26, 1) el uruguayo pasó sin pena ni gloria por Zorrilla, a donde llegó cedido por el Atlético. Heinze (60, 57) el lateral argentino rindió a muy alto nivel en todos los equipos de su carrera.

García Calvo (17, 195) uno de los grandes jugadores de la historia blanquivioleta. Tena (3, 25) otro de los muchos defensas que vistieron ambos colores. Fernando (1, 65) uno de tantos jugadores madridistas que tienen que salir para triunfar. Tote (10, 72) un delantero goleador de excelente rendimiento.

Aganzo (5, 33) un caso parecido al anterior. Actualmente es presidente de la AFE. Borja Fernández (37, 205) gran rendimiento y amor por los colores blanquivioletas. Pedro León (14, 35) un talentoso jugador que tuvo una mala salida del Pucela. Alberto Bueno (5, 88) mucha calidad, pero poca intensidad.

Lunin (5, 2) el portero ucraniano no fue santo de la devoción de Sergio González. Javi Sánchez (5, 67) las lesiones le privaron de continuidad en sus inicios. Cristo González (4, 32) una gran figura que se ha quedado en el camino.

Además de estos jugadores, hay otros ocho que, aun habiendo pertenecido a la primera plantilla blanca, no llegaron a debutar con el primer equipo, pero sí jugaron en el Pucela: Estomba (94 Real Valladolid), Pablito (52), Ricardito (34), César Gómez (64), Canabal (17), Congo (14), Rodrigo (29) y Sousa (112).

En total, 66 jugadores que recorrieron el camino Chamartín-Zorrilla en uno u otro sentido.

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