La afición del Real Valladolid mete el primer gol ante el Villareal

La federación de peñas del Real Valladolid hizo un llamamiento en redes sociales, secundado por el club, para que la afición acompañase al equipo en su llegada al estadio. Y una vez más, la afición respondió. Y lo hizo de manera brillante.

Lejos de las aglomeraciones vistas en recibimientos de otros equipos de fútbol, la llegada de aficionados se produjo de manera controlada y se fue colocando a la gente para que la distancia y la seguridad fuese compatible con la pasión y el sentimiento blanquivioleta.

Desde las 16:30 horas, varios aficionados del conjunto vallisoletano comenzaron a prepararse con pancartas y cánticos de apoyo al equipo. Con el transcurso del tiempo, a eso de las 17 horas, el recorrido desde el estadio hasta el Centro Cultural Miguel Delibes ya se encontraba lleno de gente a ambos lados de la acera para llevar en volandas a los jugadores en este crucial choque por la permanencia.

Apenas diez minutos antes del paso del bus, el ambiente ya estaba caliente. Las primeras bengalas asomaron y las gargantas comenzaron a afinarse al compás del mítico 'Pucela es de Primera'. Con la aparición del autobús del Pucela en el horizonte, la contenida emoción de los aficionados congregados se desbordó. Entre una bola de humo blanco y violeta, los hinchas del equipo pucelano aporrearon el bus del equipo para que su aliento llegase a los de dentro.

La pasión de los recibimientos propios de otros tiempos, cuando tan solo se hablaba de pandemia en películas de ciencia ficción, volvió a Zorrilla cuando más falta hacía. Cuando se necesitaba. Pese al coronavirus, las decepciones y el sufrimiento, el amor por los colores siempre está ahí.