Cinco cosas que no pueden faltar en una boda en Valladolid

Es usual ver en redes sociales vídeos en los que aseguran tener las claves para que una boda sea un éxito rotundo. Normalmente, destacan la importancia de la decoración y la atención por los detalles. Otros más arriesgados, apuestan por temáticas de los Bridgerton o Harry Potter que pueden tener muchos 'me gustas' en instagram, pero no se adaptan al gusto de todos los novios y acompañantes.

Para arrojar algo de luz sobre el tema, Lara Castán y Angélica Gento, comerciales del AC Hotel Palacio de Santa Ana, destacan las cinco claves que consideran más relevantes para organizar una boda única en Valladolid.

El punto fuerte del Hotel AC Palacio Santa Ana es que se pueden hacer bodas los 365 días del año, ya que se pueden celebrar en el jardín ,y también, en el interior, el claustro que es un lugar singular en la provincia de Valladolid. De esta forma se pueden celebrar bodas incluso en días de mucho frío o mucho calor.

Este hotel está situado a unos diez minutos del centro de Valladolid, los coches pueden aparcar tanto en el parking interior como en el exterior. Lo que facilita el ritmo de la ceremonia acortando los desplazamientos si se opta por realizar el enlace en alguno de los templos de la ciudad.

Otra de las opciones es la posibilidad de celebrar la boda civil en el embarcadero del hotel. Donde se montan las sillas, las mesas, el atril y la megafonía. Cada detalle hace que las ceremonias civiles sean diferentes. Hay novios que contratan un maestro de ceremonias y otros que prefieren hacerla más íntima, incluso hay padres que dirigen la ceremonia civil. Se suelen crear ambientes muy familiares y generalmente son muy emotivos. La mayoría de los novios lloran, por sorpresas que les preparan los más allegados.

La personalización es algo esencial para los novios. Las parejas primero indican la fecha y las ideas que tienen y en el hotel se realiza un trabajo conjunto para conseguir un enfoque de la boda y que cada día sea único. De tal modo que ese día los novios puedan centrarse en pasarlo bien, en disfrutar del tiempo con amigos y familiares.

Muy ligada con la personalización está la decoración. Es uno de los elementos que más importancia tiene para los novios, porque es lo que les ayuda a que su enlace sea diferente. Puede personalizar la minuta, el mesero, el libro de firmas… cada detalle. Por ejemplo, unos médicos hicieron los menús con nombres de medicamentos y otros con lugares que para ellos han sido importantes.

Fotomatón, cámaras 360º, pistolas de CO2, tatuajes, recenas, candy bar, donuts bar, grupos musicales, dj… La sala de fiestas es el boom final de toda la boda, tiene muchos servicios y también muchos detalles. Dentro de los servicios del hotel hay opciones de decoración y de fiesta, además muchas parejas optan por traer sus propios elementos. Los novios tienen claro que una buena fiesta es el broche final que hará que su boda sea inolvidable.

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