Qué ver en Valladolid: diez pasos de Semana Santa imprescindibles

De la Semana Santa de Valladolid se ha dicho muchas veces que es como un museo en movimiento, que se puede ver en la calle y de forma gratuita. Los pasos que procesionan durante toda la semana son prueba de ello. Todas las tallas son auténticas obras de arte que adquieren un aspecto más imponente sobre los pasos donde son alumbradas estos días.

Gregorio Fernández es uno de los protagonistas de la Semana Santa de Valladolid. Es difícil no comenzar por una de sus obras, en este caso La Quinta Angustia, imagen titular de la cofradía de la Piedad. Fue tallada en torno al año 1627 para una capilla del desaparecido convento de San Francisco. La procesión general del Viernes Santo es un buen momento para poder ver de cerca la talla, que siempre proceisona en un impresionante paso. A pesar de que no fue concebida para ser un paso procesional, se ha convertido en uno de los más representativos de Valladolid.

Imagen titular de la cofradía penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno, que encuentra en esta talla del siglo XVII su imagen titular. De esta imagen se debe destacar la cruz que Cristo porta en su camino del Calvario. Con unas dimensiones de tres por dos metros, está elaborada en madera de nogal y realizada a partir del marco de un cuadro del Ayuntamiento de Valladolid. Además de en la procesión general, se puede ver en la sede canónica de la hermandad, en la calle Peso, en un lateral del Ayuntamiento.

Una de las obras más impresionantes de la Semana Santa de Valladolid está conformada por siete figuras. Mientras en la escena alta vemos a Jesús en el momento en el que desciende de la cruz tras su muerte, en la baja encontramos a María Magdalena y Juan el Evangelista. Mientras, la virgen María espera con los brazos abiertos a recibir el cuerpo inerte de su hijo. Obra de Gregorio Fernández, data del año 1623, a excepción de la imagen de la virgen, que fue sustituida en el año 1757. Uno de los pasos procesionales que no se deben dejar sin ver en Valladolid.

De entre todas las obras de Gregorio Fernández que procesionan en Semana Santa, muchos se decantan por el Cristo de la Luz como la mejor del artista. Considerada como «la perla» del artista, representa a Cristo instantes después de haber muerto en la cruz. Repleto de detalles, siempre se destaca la espina de la corona que atraviesa su ceja, así como la oreja dañada por la corona. Otra talla que debe estar en la lista de las que se deben ver.

Otra de las obras de Gregorio Fernández que se centra en la muerte de Jesús. Esta vez, se trata de una imagen de tamaño natural, ligeramente encogida y en la que se pueden apreciar las heridas que dejó la crucifixión, incluso en las plantas de los pies. De esta imagen destaca la procesión de la Soledad, que se realiza media hora después de que finalice la Procesión General. Una de las salidas más solemnes de la Semana Santa de Valladolid.

Conocido de manera popular como 'Los durmientes', este paso destaca por los cuatro soldados romanos dormidos mientras custodian el sepulcro. Hasta el Domingo de Resurrección, dentro de la urna se encuentra un Cristo Yacente, que se saca del sepulcro en la última procesión de la semana, cuando se procesiona la urna vacía para representar la resurrección de Cristo.

Otra obra de Gregorio Fernández y, de nuevo, una de las tallas más conocidas de la Semana Santa de Valladolid. Fue parte del paso del Descendimiento, hasta que a mitad del siglo XVIII pasó a ser uno independiente. Es la imagen titular de la cofradía penitencial de la Santa Vera Cruz y una de las tallas imprescindibles para conocer la pasión vallisoletana.

De nuevo, Gregorio Fernández. Esta vez otra de sus obras maestras, tallada en el año 1619 para la cofradía de la Vera Cruz e imagen titular de la hermandad de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna. Se considera como una de las mejores representaciones de este momento de la Pasión de Cristo, por la expresión del atado así como por su anatomía. Se puede, además de en otras salidas procesionales, durante la procesión general del Viernes Santo, acompañado por su cofradía, que también alumbra sus otras dos tallas durante la salida.

Protagoniza una de las procesiones más emotivas de la Semana Santa de Valladolid, la del Encuentro, cuando esta imagen y la virgen de las Angustias procesionan hasta juntarse en la plaza de Santa Cruz. Esta image, titular de la cofradía del Santísimo Cristo Depsojado, Cristo Camino del Calvario y Nuestra Señora dela Amargura, muestra a Cristo cargando con la cruz, en una de sus caídas. Destaca la soga que sujeta la túnica, una natural.

Uno de los Cristos más impresionantes que procesionan durante la Semana Santa de Valladolid. Obra de Lázaro Gumiel, quien estudia la obra de Juan de Juni para realizar esta talla. Destaca la escasa sangre en la cabeza del crucificado, especialmente en la zona de la corona de espinas. No falta en su herida abierta en el costado, con las últimas gotas de sangre que derramó y que es una de las señas de identidad de su cofradía titular, la de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo.

• Temas
• Qué ver en Valladolid