El Zamora contrata a Rubén Cuesta, mediocentro del Atlético de Madrid B

El Zamora encontró ayer al mediocentro organizador que llevaba tiempo buscando. El primer fichaje oficial desde que Tomé se hizo cargo del equipo es Rubén Cuesta, que en las dos últimas temporadas ha militado en el Atlético de Madrid B. Cuesta llega por una temporada con opción de renovar por una más, en función del número de encuentros que dispute vestido con su nueva camiseta.

El cordobés destaca por su habilidad en el centro del campo y es un buen tirador a balón parado. En el conjunto colchonero ha disputado muchos minutos como enlace con los delanteros y en esta última temporada era un habitual de los entrenamientos del primer equipo, tanto con Carlos Bianchi como con Pepe Murcia, el que fuera su técnico en el filial hasta la destitución del argentino.

Cuesta se formó en el Séneca CF desde benjamines hasta la categoría juvenil, tras la que dio el salto al Córdoba B, en Tercera División. Después de gustar a los preparadores del filial, se hizo con un puesto en el primer equipo en siete partidos en la campaña 2000-2001. Después del Córdoba defendió los colores del Écija, hasta que el Atlético de Madrid llamó a su puerta. En la campaña 2004-2005 estuvo a punto de jugar la fase de ascenso, pero al final su equipo terminó la temporada sexto, y en esta última el club fue noveno.

Decisión

La apuesta atlética de este verano fue por dos jugadores del Burgos como el defensa Rives y el mediocentro Víctor Bravo, lo que también facilitó su marcha del club. Aunque una llamada de José María Casas al jugador fue definitiva para que decidiera firmar por el Zamora.

«Si vengo a este club es para tratar de ascender, aunque no me hayan hablado de ello directamente», apunta Cuesta, que se considera un jugador «al que le gusta tratar bien el balón. No me gusta pegar pelotazos. Trato de abarcar espacios y me gusta mirar hacia la portería contraria. Además suelo tirar las faltas. Mi punto débil quizá esté en el juego aérero, pero espero mejorar», apunta el cordobés que, el 17, lunes, aterrizará en Zamora para buscar alojamiento y aclimatarse a la ciudad antes de la primera cita con el resto del grupo para el reconocimiento médico, el miércoles 19. «Nunca he jugado en este grupo y para mí representa un nuevo reto», concluye.

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