El viento destruye un nido de cigüeñas de la Catedral de Palencia

La borrasca Aitor, la primera de gran impacto de la temporada, ya está dejando sus efectos en Palencia. Al árbol caído esta mañana sobre un coche estacionado en la calle Tello Téllez de Meneses, en un lateral del Hospital San Telmo, se suma un nido de cigüeña que se encontraba en lo alto de la Catedral y que ha sido derribado por el viento. El ramaje que conformaba el nido ha quedado desplomado junto a la Puerta del Obispo de la seo, en la plaza de la Inmaculada.

Los vientos han soplado con gran intensidad durante toda la noche en la capital palentina y han arreciado a medida que avanzaban las horas, por lo que esta mañana el Ayuntamiento de Palencia ha ordenado el cierre de todos los parques que se pueden perimetrar, con el fin de evitar que puedan causarse daños por la caída de ramas o de alguno de los árboles que presente problemas de anclaje.