Vicente Villagrá recibe la medalla de la Cámara de Palencia y realza el valor de las exportaciones

Codirigir la empresa familiar y la dirección de la Cámara de Comercio de Palencia han ocupado prácticamente a partes iguales el tiempo de Vicente Villagrá los 22 años que ha permanecido al mando de la institución. Alejado ahora de las obligaciones del cargo, tras las recientes elecciones en las que le ha sucedido Conrado Merino, Villagrá ha recibido esta mañana la medalla de oro de la Cámara de Comercio en un acto en el que se le quiso reconocer la entrega y el trabajo que durante dos décadas han marcado su gestión como representante de los empresarios palentinos.

Visiblemente emocionado, sin poder contener las lágrimas y arropado por su esposa y sus tres hijos, Villagrá reconoció que la Cámara siempre ha sido una prioridad, al igual que la codirección de la empresa familiar, y en muchas ocasiones incluso por encima de sus obligaciones personales y profesionales. Villagrá aprovechó su intervención ante todas las autoridades que asistieron al homenaje, celebrado en el hotel Castilla Vieja, para reclamara la continuidad de un organismo que considera fundamental en el panorama empresarial actual. «La nueva Ley de Cámaras supone un espaldarazo para su continuidad, son instituciones veteranas que tienen que permanecer y cumplen unas funciones importantes, que se ven avaladas con el reconocimiento de la Junta de Castilla y León en diferentes leyes», manifestó.

Villagrá recordó también los múltiples foros nacionales e internacionales en los que ha tenido el privilegio de defender y representan a las empresas palentinas y reconoció que muchos frutos posteriores vienen precisamente de allí. «Creo que la figura de la Cámara de Comercio debe permanecer, es necesaria en el futuro. Representamos al conjunto de las empresas y tenemos que decirle a la sociedad lo que necesitamos y demandamos, y eso lo están habiendo mis sucesores, luchando por Palencia, su economía y sus empresas», aseguró poco antes de recibir la medalla.

El homenajeado también dibujó una radiografía con la situación que ahora atraviesa el mundo empresarial palentino, con muchos aspectos en común desde su llegada. Villagrá explicó que, evidentemente, a lo largo de los 22 años que él ha estado al frente de la Cámara de Comercio, la renta per capita se ha multiplicado, «pero todo es siempre insuficiente. La situación actual no es fácil, pero todavía hay esperanza. Siempre con los nubarrones que trae consigo una posible desaceleración en la economía, pero todo es posible», aseguró.

El automóvil y la agricultura y las empresas agroalimentarias son los dos grandes pilares de la actividad económica en una provincia que debe poner, en su opinión, el acento en la exportación. «Ahora lo moderno supone un cambio continuo, es difícil permanecer en el mismo puesto desde el que se empieza y el reto es aumentar la actividad, el crecimiento general del tamaño de las empresas y la exportación», afirmó.

La renta per capita se ha multiplicado, todo es siempre insuficiente, hoy hay todavía esperanza, aunque siempre con los nubarrones que trae consigo una posible desaceleración en la economía, ahora lo moderno es cambio continuo, es difícil permanecer en el mismo puesto desde que se empieza.

Vicente Villagrá estuvo arropado por empresarios que formaron parte de su pleno directivo y de los que forman el actual, además de directivos de la Confederación Palentina de Organizaciones Empresariales (CPOE) y numerosas autoridades como la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén; el alcalde de Palencia, Alfonso Polanco, y el delegado territorial de la Junta, Luis Domingo González. Pero fueron sus hijos y, sobre todo su esposa, Rosa Blanco, quienes fueron sus principales apoyos en el homenaje acto celebrado ayer. De hecho, la propia Cámara de Comercio quiso entregar un ramo de flores a la mujer de Vicente Villagrá por ser ella quien de alguna manera ha sufrido durante dos décadas el trabajo constante de su esposo en la Cámara de Comercio.

Defensor a ultranza de una provincia como Palencia, convencido de que la estratégica situación geográfica es un valor en alza que actuará como atractivo de empresas y enamorado de una ciudad en la que se resiste a pensar que el pequeño comercio tiene los días contados, Vicente Villagrá prefirió olvidar los malos momentos para centrarse en las múltiples satisfacciones que ha encontrado en un cargo nunca remunerado, pero del que se siente enormemente pagado en alegrías por los logros para los empresarios palentinos.

También fueron su entrega permanente y su fuerte capacidad de trabajo los aspectos que quiso destacar el actual presidente de la Cámara, Conrado Merino, cuando entregó el galardón a su antecesor, del que también ha sido siempre estrecho colaborador. «Vicente Villagrá es un hombre serio, afable, honrado y muy trabajador. Hemos querido reconocer con esta medalla su entrega permanente a la Cámara de Comercio, una institución que ha estado dirigiendo durante 22 años y que ha protagonizado en muchas ocasiones su agenda de trabajo. Han sido muchas las veces en las que esto estaba incluso por encima del trabajo en su propia empresa, dejaba de lado algunas cuestiones que tenía en la empresa familiar para pasarse por la Cámara de Comercio y dedicarse a cualquier cuestión que allí estuviera pendiente, por eso hemos creído que merecía este reconocimiento», indicó Conrado Merino. Artífice también del estrechamiento de la colaboración con la CPOE, una institución que Villagrá siempre ha considerado 'hermana' al defender los mismos fines, en el acto quiso estar presente el actual titular, José Ignacio Carrasco, en nombre de todo su equipo.