El 43% de vacunas para viajes internacionales son de la hepatitis y el 19%, de la fiebre amarilla

«Cuando nos vamos de vacaciones, podemos llegar a un sitio donde estamos en contacto con otros virus y bacterias, por eso tenemos que proteger a esos viajeros», señala el jefe del servicio territorial de Sanidad en Palencia, Luis Fernardo Román. Para cubrir estas necesidades trabaja el Centro de Vacunación Internacional de Palencia, gestionado por la Sección de Epidemiología, y competencia exclusiva del Ministerio de Sanidad, quien hace un convenio de colaboración con las autonomías, al ser con países terceros.

«La Constitución de 1978 ya señaló que todos teníamos derecho a la protección a la salud. Y también añadió a los poderes públicos que eso tenían que organizarlo y tutelarlo», explica Román. Y posteriormente se aprobó la Ley de Sanidad General y se orientó a la protección de la salud y más concretamente ante cualquier producto o actividad que pudiera generar daño para poder controlarlo y tomar medidas de actuación.

El equipo que conforma el Centro de Vacunación Internacional, que se creó en 1986 y está situado en el edificio del servicio territorial de Sanidad, junto a San Lázaro, está compuesto por cuatro personas (dos médicos y dos enfermeras) y atendió el año pasado a un total de 1.104 viajeros (606 mujeres y 498 hombres), con una media de edad de 40 años. Se recomendó administrar 1.090 vacunas y finalmente se pusieron 1.682 (contando segundas y terceras dosis). Además, se aconsejaron 396 quimioprofilaxis antipalúdicas (para proteger al paciente frente al paludismo durante un viaje) y diez tratamientos de reserva contra el paludismo (lo que representan el 34% de los viajeros).

De las más de mil personas que acudieron en 2023 al Centro de Vacunación Internacional, casi el 30% (concretamente el 29%) no tenía el calendario infantil de vacunación completo. «Como a lo mejor se pierde la protección por ese motivo, pueden venir aquí y recibir una vacuna infantil y ninguna para viajar a otros países como Tanzania o donde vayan», argumenta el jefe del servicio territorial de Sanidad.

De los viajeros que acudieron el año pasado, casi la mitad (el 47,6%) tenía alguna situación especial: un 17,1% era alérgico a medicamentos, alimentos o a algún alérgeno ambiental; un 1,8% sufría de ansiedad o depresión; un 0,9% tenía alteración de la inmunidad; un 29,1% refería enfermedades previas y un 33,1% tomaba algún medicamento en el momento de la consulta.

Los pacientes son atendidos en el centro con cita previa y para los profesionales que conforman este gran equipo es necesario conocer sus antecedentes de vacunación y las características sanitarias. También tienen que saber las alertas que existan en el país de destino y la situación sanitaria de este. Esta información tan importante se conoce a través de la alerta de Organización Mundial de la Salud.

El éxito de vacunación del centro palentino queda patente por el número de personas de fuera de la propia provincia que acudieron el año pasado para recibir las dosis necesarias para viajar al exterior. De los 1.104, solo 709 eran de Palencia, esto representa el 64,2%. Un total de 303 vallisoletanos se desplazaron hasta la capital del Carrión para recibir las dosis necesarias y así poder llevar a cabo su viaje internacional, lo que representa el 27,5% de los pacientes atendidos. Además de Palencia y de Valladolid, los pacientes procedían de doce provincias más el año pasado: Ávila (1), Barcelona (3), Burgos (21), Cádiz (1), Cantabria (2), León (4), Madrid (29), Salamanca (11), Segovia (2), Soria (3), Vizcaya (6) y Zamora (9).

Ninguno de los que acudieron hasta el Centro de Vacunación el año pasado viajaban para llevar a cabo una adopción. El 76,9% de las consultas tuvo como objetivo el turismo. Dentro de este, el 34,6%, 383 personas, hicieron turismo de aventuras y 468, el grupo más numeroso que asciende al 42,3%, se debió a los viajes organizados.

Las personas que se desplazaron al extranjero para visitar a la familia ascendieron a 140 (12,6%), por trabajo fueron 67 (6%), para formar parte de cooperación internacional 58 (5,2%), mientras que por estudios fueron 24 (2,1%) y por otros motivos diferentes, un 0,3% (cuatro pacientes).

De las 1.682 vacunas administradas el año pasado, la más numerosa en el Centro de Vacunación Internacional fue la Hepatitis A de adultos, con un total de 727. También fue necesario inyectar 72 vacunas de Hepatitis B de niños y nueve Hepatitis B, pero de mayores.

La fiebre amarilla fue la siguiente más demandada, acorde a los destinos de los pacientes, en 2023, con 318 dosis. Posteriormente, la vacuna tifoidea fue necesaria 159 veces, mientras que el tétanos/difteria de adultos ascendió a las 154.

También fueron necesarias el año pasado 89 vacunas de Meningitis conjugada ACWY, 46 de la triple vírica (sarampión, rubeola y parotiditis), 41 de rabia, 33 de polio, 12 de difteria/tétanos/tosferina/polio, 5 de encefalitis japonesa y otras 5 de encefalitis centroeuropea (3 de adulto y 2 infantiles), 3 de gripe fraccionada, 2 de la tetravírica (sarampión, rubeola, parotiditis y varicela) y una sola de dengue.

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