Trescientas personas se manifiestan en Palencia al grito de 'Palestina libre'

La concentración, que ha comenzado en el Paseo del Salón, se ha extendido hasta la estatua de la Mujer Palentina donde Naser Alahmad, portavoz de la Agenda Social de Palencia, ha leído el manifiesto. «Con la excusa de defenderse del terrorismo, Israel aplica una política de terror y expulsión mediante permanentes incursiones militares en las que con asiduidad se perpetran crímenes de guerra», ha afirmado.

Numerosas banderas, música tradicional palestina y muchas 'kufiyas' –el pañuelo típico de Palestina– han acompañado a los manifestantes, que han desafiado una tarde desapacible para recorrer la arteria principal de la capital acompañando su paso de voces y gritos reclamando el fin del conflicto que se vive.

Naser Alahmad, palestino y residente en Palencia, señalaba también que condenan «este bombardeo, genocidio y masacre que está llevando a cabo el Estado de Israel. Queremos que llegue nuestra voz al Congreso de España, al Gobierno de España y al Parlamento Europeo para que intervengan, porque nosotros no podemos seguir callando mientras se está bombardeando un hospital. Queremos mandar un mensaje para condenar esto y que haya un alto al fuego».

El portavoz de la Agenda Social de Palencia, quien tiene familia en Palestina, aseguraba que «la familia lo está viviendo como siempre. Vivimos con colonos que nos provocan y estamos sometidos por la sociedad israelí, que cualquier día nos puede arrestar. Esto ha empezado por Hamás, pero es un partido legal, yo no soy de Hamás, somos palestinos y queremos defender nuestra patria y reclamar el estado palestino. Hay miles de sanciones en contra de Israel, pero nunca se ejecutan», ha añadido.

Malak Kshad, refugiada libia en Palencia desde hace seis años, ha sido otra de las manifestantes que ha denunciado «la parálisis a la que está sometida el mundo después de más de una semana de muertes» y ha señalado que «es un tema muy grave. Nadie para una guerra en la que se está matando a la población civil sin sentido. Si los gobiernos hoy en día no toman una decisión final, nos va a afectar a todos, como cualquier guerra en el mundo».

La joven libia exigía una unidad para defender a los civiles que en Palestina se encuentran sin agua, sin luz y sin alimentos como primeras necesidades humanas. ¿Dónde vamos a llegar así?, se preguntaba Malak Kshad, quien se expresaba de forma impotente. «Yo llevo seis años refugiada en Palencia, lejos de mi familia y habiendo dejado todo allí y no quiero que a los palestinos les ocurra lo mismo», afirmaba.