Solo diez pueblos crecen en dos décadas en las que la provincia de Palencia pierde 18.000 vecinos

La caída de población avanza rápido y solamente 20 municipios de los 191 de la provincia, incluida la capital, cuentan el padrón por encima del millar de habitantes, una cifra que superaban hace dos décadas por ejemplo Alar del Rey, Becerril de Campos, Osorno, Torquemada, Villarramiel o Villada, pero que ahora solo cuentan vecinos en tres dígitos. El Instituto Nacional de Estadística (INE) acertó en sus previsiones al estimar que sería en 2015 cuando se cruzara la línea roja del crecimiento vegetativo negativo. Y así ha sucedido, ya que la población española alcanzó en 2005 un crecimiento vegetativo negativo por vez primera desde 1999 porque la cifra global de defunciones superó a la de nacimientos. Este hecho, que no se registra en ejercicios completos desde la Guerra Civil o la epidemia de la gripe española en 1918, lanzó una señal de alarma en torno a un problema que sufre la sociedad española y desafortunadamente la alarma toca en Palencia tanto en caída del padrón como en crecimiento vegetativo negativo como en fuga de vecinos a otras provincias y países.

El envejecimiento de la población, la caída de la natalidad y la fuga de jóvenes a otras provincias, además del golpe de la covid, se han instalado en la radiografía poblacional de la provincia. Ya en 2016, es decir hace cinco años, el Instituto Nacional de Estadística (INE) lanzó una proyección de población que auguraba que la provincia de Palencia perdería 18.821 en quince años, hasta situarse en los 145.434 en 2031. Y desafortunadamente la caída de población avanza rápido, a la vez que coincide esa fatídica cifra de proyección, no augurio, con esos 18.000 vecinos perdidos en estas dos últimas décadas.

Los últimos datos del INE también revelan que Aguilar (6.711 habitantes, si bien tenía 7.589 en 2001) se mantiene como el municipio más poblado después de la capital, pero Guardo (con 5.786 vecinos, 2.762 menos que hace veinte años, cuando era el más grande de la provincia tras la capital), se mantiene en cuarta posición, superado por Venta de Baños (6.399, manteniéndose en esas cifras en los últimos veinte años, incluso ganando 341 vecinos desde 2001) y por Villamuriel de Cerrato (6.470, que ha crecido en 1.584 respecto a los 4.886 de 2001, y se acerca al más poblado, Aguilar de Campoo).

La provincia de Palencia ha perdido 18.222 habitantes entre 2001 y 2021, según el último padrón municipal de habitantes hecho público estos últimos días por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Solo diez pueblos ganan peso en el padrón, y entre todos ellos suman 5.312 vecinos más, lo que supone un tercio del saldo vegetativo negativo que arroja la provincia de Palencia en estos veinte años.

Que las localidades del entorno de la capital han crecido considerablemente en lo que va de siglo es una evidencia. La proliferación de urbanizaciones con viviendas unifamiliares, más escasas y menos asequibles en la capital, son un reflejo de ese crecimiento urbanístico y poblacional. Pero los datos también constatan esas consideraciones. Y es que, de hecho, Villalobón se coronó en 2009 como el séptimo municipio de Castilla y León con un mayor crecimiento de la población entre el 2000 y el 2007, con un incremento porcentual del 149,4% en un estudio efectuado sobre más de ocho mil localidades españolas.

Grijota y Villamuriel de Cerrato, y Magaz de Pisuerga en menor medida, conforman el poblado alfoz de la capital. Se trata de municipios que vieron entre finales del siglo pasado y principios de este XXI levantar numerosas urbanizaciones. Y es muy probable que con los efectos del covid estos pueblos del alfoz salgan también beneficiados demográficamente por el deseo latente de la población de vivir en casas más amplias y con zonas verdes y no en las ciudades.

Además de los municipios del alfoz, ganan vecinos, pocos pero al menos arrojan un saldo positivo en veinte años, Dehesa de Romanos (12 más), Hornillos de Cerrato (22), Salinas de Pisuerga (39), Villamartín de Campos (30), o Villarmentero (3 más), si bien en su mayoría el incremento de población corresponde más a la década de 2001 a 2011 que a la última.

Otro dato que arroja el padrón es que nueve municipios están por debajo de los treinta vecinos: Baquerín de Campos, Belmonte, Boada, Pozo de Urama, Requena de Campos, San Cristóbal de Boedo, Tabanera de Valdavia, Villarmentero y Villodre.