Mes y medio como lotera y ya ha repartido un premio de 182.120 euros

Su actual propietaria, Sandra Bueno, reconoce que el premio ha supuesto una enorme alegría no solo para el barrio, sino que también para ella por la rapidez con la que han comenzado a llegar los premios. «Hemos empezado con muy buen pie y estamos encantados», afirma esta joven palentina, que está de enhorabuena por doble motivo. «Estamos deseando entregar más premios, por supuesto. Además, hace poco nos hemos enterado de que estoy embarazada, y la gente ya viene a la administración para frotar los décimos en la barriga. Son muy supersticiosos en ese aspecto», reconoce entre risas.

«Es una maravillosa noticia después de un año complicado por culpa de la pandemia. Y la alegría es mayor porque el premio se queda en el barrio», afirma. La administración, que ayer por la tarde abría a las 17 horas, ya congregaba, igual que por la mañana tras un lunes festivo, a un buen número de palentinos interesados en comprar un décimo, echar la Primitiva o apostar en la Quiniela. «Cuando toca un premio de grandes cantidades, anima a que la gente venga, es así», explica la lotera, que explica que aún no sabe quien ha podido ser el afortunado, aunque confiesa estar muy contenta por su vecino y por el éxito que ha supuesto para la propia administración.

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Pese a estas buenas noticias, afirma que el sector no está pasando por su mejor momento desde hace ya más de quince años. «Las ventas han caído por culpa de las crisis. La economía se ha resentido y la gente juega menos de lo que lo hacía antes. Este sector lleva 17 años con las comisiones congeladas y eso nos afecta mucho. La gente ve entrar el dinero, pero de esas cantidades nos llevamos una comisión mínima», reconoce Sandra Bueno. Una situación que dice que se agrava aún más con las ventas de todo tipo de lotería a través de Internet.

Un premio que ha servido para reivindicar un poco más a las administraciones de los barrios, que muchas veces son las grandes olvidadas frente a las del centro de las ciudades. «En el centro, los turistas son muchas veces los protagonistas, pero en los barrios se están animando cada vez más los vecinos», explica Sandra. De hecho, esta ha sido una de las administraciones que ha visto incrementadas sus ventas debido a la vacunación en el cercano Pabellón de Campos Góticos. «El hecho de que se vacune a la gente tan cerca ha supuesto un incremento en el número de décimos vendidos durante estas fechas», explica satisfecha por las constantes visitas, igual que las recibidas ayer martes después del premio del Gordo de la Primitiva más importante el día, ya que el primero quedó desierto. «Después del premio ha empezado a venir gente de otros sitios de la ciudad. Eso también se ha notado en las ventas de la Lotería de Navidad, que comienzan a tener cierto tirón», concluye Sandra Bueno, que se siente doblemente bendecida por el reparto del premio y por su reciente embarazo.