Las reservas se paralizan y las agencias de viaje de Palencia se hunden en otro mal año

La incertidumbre ante nuevas medidas y el temor al contagio están haciendo que muchos palentinos estén aparcando sus reservas de vacaciones para este verano o que algunas de las que ya estaban hechas se comiencen a caer a última hora.

Hace menos de dos meses, cuando asomaba el verano, la sensación generalizada era de esperanza e ilusión por que la tendencia al alza de reservas que había despuntado se mantuviera. Y es que agencias de viajes y turoperadores llevaban «paralizados y sin apenas facturar más de catorce meses». El fin del estado de alarma y el avance en la vacunación hizo que muchos palentinos comenzaran a pensar ya en sus vacaciones estivales y empezaran a contactar con sus agencias de viaje habituales.

Destinos nacionales como las Islas Canarias y Baleares eran los más solicitados, igual que la costa. También la vecina Portugal y destinos en el Caribe como Costa Rica o República Dominicana, que llevaban meses recibiendo turistas sin apenas restricciones de entrada a sus países. Junijulio, agosto y septiembre se presentaban como cuatro meses fuertes que permitirían repuntar al sector después de la caída del estado de alarma. «Estamos esperanzados de que esta tendencia se mantenga. Nosotros hasta que no termina el viaje no cobramos, entonces trabajamos a largo plazo. Ahora mismo seguimos sin facturar hasta que en dos o tres meses sí que podamos hacerlo», afirmaba a finales de mayo la presidenta de la Asociación Palentina de Agencias de Viaje, Mónica Blanco.

Sin embargo, esas esperanzas e ilusiones pronto se han desvanecido. «En el global del año este va a ser un mal año, no cabe duda. Por muy bueno que sea de aquí en adelante. Estamos en torno a un 75-80% menos que en el año 2019», explica Marcos González, de Viajes Avismar.

A pesar de que junio fue un mes bastante bueno, a raíz de los contagios producidos en el macrobrote de Mallorca, muchas personas han decidido posponer sus vacaciones y este parón ya se ha comenzado a notar en las agencias de viajes.

La incertidumbre nacional se une a la internacional, cuyos turistas son los mayoritarios en muchas zonas de playa del litoral español. La falta de turistas extranjeros, sobre todo alemanes, está haciendo que muchos hoteles de la costa y de las islas se vean obligados a cerrar porque necesitan al viajero internacional para poder mantenerse.

En cuando a los destinos preferidos por los palentinos, la zona norte de España, la costa y las islas son lo más elegidos. El turismo internacional es minoría, aunque hay países del Caribe que están teniendo una alta demanda ya que, de momento, viajar por Europa es bastante más complicado.

Las previsiones eran bastante más positivas de lo que se está viendo porque, ante la incertidumbre de lo que pueda ocurrir, la gente se paraliza. Así lo indica María Isabel González, de Barlovento Viajes.

«Nos encontramos en un desastre en relación al año 2019. Junio y julio, que son meses muy buenos, no están respondiendo tan bien como creíamos. No tiene nada que ver con lo de hace dos años. La gente que hace reservas es a última hora y mucha gente ya piensa en irse en septiembre u octubre, cuando estemos todos inmunizados», destaca María Isabel González.

Dentro de esta situación, lo que más se ha reactivado ha sido el turismo por España, la costa peninsular y las islas, y muy pocos son los que se atreven a salir fuera. Los que lo hacen, se decantan por el Caribe, que es donde menos restricciones de entrada hay actualmente.

«Iba todo bien hasta que se ha empezado a ralentizar. Dentro de que no estaba siendo un año bueno, porque solo podíamos vender islas, costa y algo del Caribe, a raíz del tema de Baleares se ha parado todo. La pasada semana lo hemos notado bastante y ahora tenemos el miedo de que las reservas de las últimas dos o tres semanas se vayan atrás», afirma David Diez, de Viajes Quorum.

Aunque todos los viajes cuentan con un seguro de cancelación, a diferencia del año 2020, el alarmismo que está generando el aumento de los contagios ha hecho que mucha gente espere antes de reservar a ver cómo evoluciona la situación.

David Diez prevé que va a ser un año «bastante malo». No como el 2020, al que tilda de «verdaderamente desastroso», pero sí muy negativo, sobre todo tras el optimismo en las previsiones que se realizaron una vez concluyó el estado de alarma en el mes de mayo.

Por su parte, Belén Atienza, de B The Travel Brand, afirma que lo que más se está vendiendo son zonas cercanas como el norte, pero también las costas y las islas, ya que lo que va buscando mucha gente es un buen clima. Otros clientes sí que quieren larga distancia, como muchos novios que no pudieron celebrar su luna de miel el año pasado. La Riviera Maya, Costa Rica o República Dominicana son los destinos elegidos por estas parejas de recién casado.

Además, muchas de las políticas internacionales de entrada a países están en continuo cambio. Es el caso de la República Dominicana, que no pedía antes ningún tipo de prueba de diagnóstico para entrar en sus fronteras pero sí desde este pasado jueves. «Estábamos vendiendo muy bien el Caribe por este motivo. Ahora, a mucha gente que lo tenía ya contratado les tenemos que decir que esto ha cambiado», indica Belén Atienza.

A la actual crisis sanitaria también hay que unirle la situación política y social que está atravesando Cuba, un destino que se había estado vendiendo muy bien y cuyos viajes están comenzando ahora a ser cancelados. En los últimos días, todas las reservas se han caído, aunque hay una minoría que sí que quiere arriesgar y decide irse a pesar de la inestabilidad política.